La vivienda donde Amy Winehouse residió en sus últimos años ha sido puesta a la venta por su padre Mitch, quien hasta ahora utilizaba el inmueble como sede de la Fundación Amy Winehouse.
Aunque la familia de la estrella se mostraba en principio reacia a desprenderse de la casa por su gran valor sentimental, todos han acordado finalmente que no tiene sentido mantener una propiedad en la que nadie de ellos quiere vivir.
"Los Winehouse han tomado con mucha tristeza la decisión de vender la casa de Camden. Amy adoraba el edificio pero ninguno de ellos se siente con fuerzas para darle utilidad al inmueble, y menos aún entrar a vivir en él. No resulta sensato mantener la casa vacía mientras se siguen pagando sus gastos, así que lo más adecuado es dejar que una nueva familia disfrute de un nuevo hogar, en este caso, de uno maravilloso", declaró un portavoz de la familia al diario The Sun.
La venta, sin embargo, también podría reportar un gran beneficio económico a los padres de Amy Winehouse, ya que el precio que han establecido por el inmueble es de casi 3,5 millones de euros, más de un millón adicional de lo que la artista había pagado por la propiedad cuando la compró hace dos años.
Amy Winehouse fue encontrada muerta en su casa en julio de 2011.