Durante más de medio siglo deberán permanecer en prisión dos militares más por su responsabilidad en un ‘falso positivo’, como se denomina en Colombia un tipo de ejecución extrajudicial que, en este caso, se produjo en Socotá, Boyacá.
Así lo determinó el Juzgado Único del Circuito Especializado de Santa Rosa de Viterbo, Boyacá, que además les ordenó pagar más de 2.800 millones de pesos equivalentes a la suma de casi 5.600 salarios mínimos mensuales vigentes.
La víctima, Mauricio Hernández Cuadrado, despareció de su lugar de residencia en Tunja, Boyacá, y luego apareció como baja producida en un combate entre guerrilleros de las Farc y efectivos del Batallón de Artillería No.1 Tarqui de Sogamoso.
El Cuerpo Técnico de Investigaciones, CTI, estableció que el occiso no hizo parte del supuesto combate que, según los militares, se había producido en el municipio de Socotá, sino que era un civil que trabajaba en el terminal de la capital boyacense como independiente.
La medida afecta a Diego Hernán Moreno y Segundo Yebrail Gálvis Nieto, que fueron declarados penalmente responsables de los cargos de homicidio en persona protegida y secuestro simple agravado.