Las ventas minoristas de Estados Unidos cayeron en septiembre, golpeadas por una baja en las compras de vehículos motorizados al concluir el programa de incentivos del Gobierno, pero el declive fue menor al esperado, mostraron datos oficiales el miércoles.
Eliminando el componente volátil del sector automotor, las ventas subieron por segundo mes consecutivo en septiembre, reforzando el criterio de que el gasto del consumidor se recupera y que la economía comenzó a crecer en el tercer trimestre tras la peor recesión desde los años 1930.
El Departamento de Comercio de Estados Unidos dijo que las ventas minoristas totales bajaron un 1,5 por ciento en septiembre, la mayor baja desde diciembre, tras haber repuntado a una cifra revisada del 2,2 por ciento en agosto.
Las ventas de septiembre se vieron afectadas por una baja en las compras de vehículos después de llegar a su fin en agosto el popular programa de “efectivo por chatarra”.
Ese plan dio a los consumidores efectivo para adquirir vehículos nuevos y más eficientes en el uso del combustible. Las ventas de automóviles y partes se desplomaron un 10,4 por ciento en septiembre, la mayor caída desde agosto del 2005, tras haber subido un 7,8 por ciento el mes anterior.
Excluyendo vehículos y partes, las ventas minoristas subieron un 0,5 por ciento en septiembre, más de lo esperado, tras un incremento de 1,0 por ciento en agosto. Los economistas esperaban un aumento de 0,2 por ciento en esta categoría.
Las ventas probablemente recibieron el respaldo del inicio del año escolar, así como las mejores ventas de muebles e implementos para el hogar desde enero del 2007.
Las ventas en las estaciones de gasolina subieron 1,1 por ciento en septiembre tras haber crecido un 4,7 por ciento en agosto.
Excluyendo gasolina y automóviles, las ventas minoristas se incrementaron un 0,4 por ciento frente a un avance de 0,6 por ciento en agosto.
Las ventas de materiales para la construcción cayeron un 0,2 por ciento en septiembre tras una baja de 1,2 por ciento el mes anterior.