Ni la centro-izquierda, ni la centro-derecha en Bogotá lograron ponerse de acuerdo y este viernes ambos frentes políticos anunciaron que no apostarán por la consulta como mecanismo para elegir candidato único con miras a la Alcaldía de Bogotá.
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Luego de que en la mañana el bloque político conformado por Alianza Verde, Polo, UP, MAIS, Colombia Humana y En Marcha declinó a la consulta –alegando los costos que implica para el Estado–, en la tarde de hoy se conoció que Ángela Garzón (Centro Democrático) y Miguel Uribe (movimiento Avancemos) tampoco recurrirán al mecanismo, aduciendo la misma razón: austeridad, pues se calcula que el mecanismo puede llegar a costar hasta $40.000 millones.
“Siguiendo los principios fundamentales por los que se caracteriza el partido, no considera pertinente utilizar el dinero de la Nación para realizar temas de elección popular, por lo tanto, no se realizará una Consulta Popular abierta. La austeridad del estado es uno de los pilares por los que lucha el Centro Democrático, por ello, todo proceso de elección se realizará de forma interna”, anunció el Centro Democrático.
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Pese a la oposición de Miguel Uribe, que insistía en la consulta con miras a fortalecer la democracia y la participación, así como generar mayor visibilidad entre los votantes, se terminó imponiendo Ángela Garzón, quien aseguró que una consulta dejaría por fuera a otros contendores afines a la centro-derecha que podrían inclinar la balanza: el exministro de las TIC David Luna y el exsenador Carlos Fernando Galán.
Al conocer la postura del Centro Democrático, Uribe reaccionó y lamentó la decisión de Garzón: “Perdimos una oportunidad de unir un sector que representa el futuro, que defiende Bogotá y busca avanzar. Mantengo mi intención de hacer equipo para evitar que vuelva el populismo y la corrupción a Bogotá”.
En respuesta, la concejal invitó al exsecretario de Gobierno de la administración Peñalosa a dialogar y discutir las propuestas “sin necesidad de gastar $40.000 millones, “que pueden invertirse en políticas sociales o en construir unas de las obras que se le quieren cobrar a los ciudadanos por valorización”.
Al margen de las dificultades de lado y lado, lo cierto es que el tiempo corre y cada día es clave para consolidar nombres y propuestas. De allí que los expertos aboguen por alcanzar la unión, superar las diferencias e ir decantando nombres. Insisten, eso sí, que sin coaliciones difícilmente se podrá conquistar el que es considerado el segundo cargo administrativo y político más importante del país.
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