Cinco cigarrillos de marihuana y una semana de trabajo es lo que Fernando de la Rocque invierte en promedio en la elaboración de una de sus obras. Cada bocanada de humo es usado para darle forma a las figuras que anteriormente a cortado para hacer las plantillas. Ver las obras hechas con humo de marihuana.
De la Rocque además de ser consumidor de marihuana es un diestro artista que ha llamado la atención del mundo del arte por los elementos con los que trabaja.
Su más reciente colección de llama "Blow Job" y es expuesta en la galería La Cucaracha, en Río de Janeiro, en la que se presentan íconos del mundo religioso y político desde el punto de vista de De la Rocque.
Para Fernando de la Rocque es más importante la libertad de expresar y crear arte con la marihuana que la misma libertad de fumarla. Con informacion de The Huffington Post.