El alemán Sebastian Vettel, que se convirtió a sus 23 años en el campeón más joven de la historia de la Fórmula 1, aseguró este martes que "este título no es un fin" y que espera confirmarse la próxima temporada.
"No es como si me hubiese proclamado campeón de un día a otro: se trata de un objetivo que perseguía desde niño y, cuando se consigue, es un gran paso hacia adelante", explicó Vettel en una conferencia de prensa organizada por Red Bull en Salzburgo.
"Pero, este título no es un fin, sino que debe continuar. Se encuentran otras razones para motivarse. La gente que nos conoce puede estar tranquilos que queremos continuar estando ahí la temporada próxima y luchar por lo que hemos logrado este año", añadió.
Vettel, segundo alemán que se proclama campeón tras Michael Schumacher, señaló que el objetivo marcado el año que viene consistirá en "defender los dos títulos de piloto y constructores".
"Pero todo esto está todavía lejos, tenemos que volver a la tierra, tomar algún tiempo para uno mismo y recuperar la energía durante el invierno", advirtió.
"Quiero aprovechar el momento que estoy viviendo", insistió el piloto de Red Bull.
El flamante campeón del mundo se marchará a Milton Keynes, Inglaterra, donde se encontrará con el equipo de Red Bull y después se desplazará a Abu Dhabi para sus primeras pruebas en vistas a la temporada próxima.
"No puedo esperar de regresar a la cabina porque nadie me va a hacer más preguntas y me podré recuperar", bromeó.
Además, Vettel participará el 27 y 28 de noviembre en Dusseldorf en la "Carrera de los campeones", donde formará equipo en la prueba por países con Michael Shumacher.
Por su parte, el australiano Mark Webber reconoció este martes haber tenido diferencias con su compañero de equipo durante la temporada de Fórmula 1, "rivalidad que ha conseguido que Red Bull fuera más fuerte".
"La situación entre nosotros ha logrado un equipo más fuerte, aunque también nos ha costado puntos, debido a que nuestra competencia era demasiado dura", admitió Webber.
El australiano, que llegó a volar con su monoplaza en Turquía a causa de una maniobra desafortunada de Vettel, expresó que se trataron de "pequeños problemas que han sido exagerados por la prensa".
"Lo más importante es que al final nos hemos dado la mano", subrayó Webber, quien terminó tercero del campeonato, a 14 puntos del campeón.
"Se mentiría si todo era de color de rosas entre nosotros. Hubo momentos en los que no teníamos la misma opinión, pero eso es normal cuando se compite al mismo nivel", explicó también Vettel.
Webber añadió que su compañero "merece todas las felicitaciones que ha recibido" pero agregó que "no se trata de la última carrera, solamente de la temporada, ya que todo volverá a comenzar desde cero".