Lotus presentó en Londres el T127, el auto con el que la legendaria escudería británica vuelve al campeonato mundial de fórmula uno tras su retirada en 1994.
El modelo que conducirán Jarno Trulli y Heikki Kovalainen llevará los mismos colores -verde y amarillo- que los inconfundibles coches de Lotus que compitieron en las décadas de 1950 y 1960.
"No se puede expresar con palabras cómo me siento hoy", manifestó el propietario del equipo, el empresario malayo Tony Fernandes, según recoge la página web www.autosport.com.
"Es un tarea apasionante conseguir una licencia, tener a cinco personas en Hingham (construyendo el coche en esta localidad del noreste de Inglaterra) y aparecer hoy aquí con el nuevo coche", manifestó Fernandes, quien ha contado en este proyecto con la ayuda de Clive Chapman, hijo de Colin Chapman, fundador del equipo Lotus.
"Me entusiasmó saber que Clive dijo que este proyecto es como los comienzos de Lotus", manifestó el empresario.
Fernandes reconoció que el equipo tiene sobre sus hombros el peso de leyendas del automovilismo que corrieron con Lotus, como Jim Clark, Damon Hill o Nigel Mansell, y realtó: "Tenemos una empresa tremenda por delante".
"Moveremos hasta la última piedra y haremos todo lo que podamos para que Lotus vuelva a sus días de gloria", añadió.
El nuevo coche fue probado esta semana en el circuito de Silverstone y está previsto que el equipo empiece a compararlo con el de otras escuderías rivales en Jerez (España) la semana que viene.