:format(jpeg)/www.elespectador.comhttp://thumbor-prod-us-east-1.photo.aws.arc.pub/2QkNs2yLqYDsk4JWCxfYwS1u-xw=/arc-anglerfish-arc2-prod-elespectador/public/M74E3OXDPRGZRKPMDU53YKLIME.jpg)
Carlos Muñoz sabe bien qué es llevar la pasión por los autos en las venas. Desde siempre tuvo el sueño de competir, quería emular lo hecho por Juan Pablo Montoya en la IndyCar en 1999 y en las 500 millas de Indianápolis un año más tarde. Él fue su mayor referente. A los siete años inició su camino por este sendero empedrado, se subió a un kart que le dieron a su padre como parte pago de una deuda y, desde ahí, no ha salido de las pistas.
Después de darse cuenta que la puerta de entrada a la Fórmula Uno es muy pequeña, se decidió por la Indy y su talento no tardó en aparecer. En 2013 tuvo un año brillante en la Indy Lights y además obtuvo su primer podio en la carrera más emblemática de este deporte en Estados Unidos, las 500 millas de Indianapolis.
Tres años después de darse a conocer al mundo con una presentación sublime en esa competencia, el Indianapolis Motor Speed Way volvió a ser testigo de su destreza tras el volante y aunque nuevamente la victoria se escapó como agua entre los dedos, este piloto ha dejado el nombre de Colombia muy en alto en la IndyCar.
Es este mismo amante de los motores el que pisará el acelerador a fondo en el nuevo proyecto de esta casa editorial, Drive El Espectador, un programa en el que desde este martes, y cada 20 días, probará los últimos lanzamientos y los carros más apetecidos del mercado colombiano.
Muñoz llevará al autódromo, a pistas 4x4, rutas off road y circuitos pavimentados vehículos de diferentes marcas y gamas para ponerlos al límite y evaluar su comportamiento.
Si usted es de los que vive la vida en cuatro ruedas, espere este martes en la noche a las 8 p.m. Drive El Espectador.