Nairo, el rey de los dos mares

Cada vez que nuestros escarabajos ruedan por carreteras europeas se encargan de demostrar que Colombia es, sin lugar a dudas, una de las grandes potencias del ciclismo de ruta en el mundo.

 

Una vez más quedó demostrado ayer, cuando el podio de la edición 50 de la tradicional clásica Tirreno-Adriático, en Italia, se tiñó de amarillo, azul y rojo.

 

El boyacense Nairo Quintana logró el título general y el de mejor novato. Además ganó la etapa reina el domingo. El pedalista del equipo Movistar sigue enriqueciendo su palmarés, en el que ya cuenta con las coronas del Tour de L’Avenir de 2010; la Ruta del Sur y la Vuelta a Murcia de 2012; las vueltas al País Vasco y Burgos de 2013, y el Tour de San Luis y el Giro de Italia de 2014, sin contar podios y actuaciones brillantes, como la del Tour de Francia 2013, cuando finalizó segundo y fue rey de la montaña y el mejor joven.

 

“Esta victoria ha sido muy buena para la moral. Después de la caída en la Vuelta a España del año pasado había pasado un período importante sin vivir un momento de felicidad como el de hoy, ese para el que uno se prepara e invierte tanto trabajo”, señaló luego de recibir la camiseta azul y el bello trofeo de campeón.

 

El colombiano hizo una valoración de la prueba italiana y lo que vendrá en su temporada: “Afortunadamente no tuvimos ningún percance esta semana y todo el equipo estuvo siempre a la altura, muy fuerte. No sólo los compañeros sino el conjunto en general, directores, masajistas, auxiliares... siempre están muy pendientes de mí, ayudándome. A ellos y a mi familia va dedicado este éxito. Ahora descansaremos unos días antes de afrontar las clásicas de pavé la próxima semana, y luego, la Vuelta al País Vasco”.

 

Quintana, que asumió el liderato de la prueba el domingo, supo manejar la diferencia que les llevaba a sus más inmediatos rivales y sorteó sin mayores contratiempos la contrarreloj de ayer, sobre 10 kilómetros de recorrido en terreno llano, con llegada en San Benedetto del Tronto.

“Con calma no iba, pues ha sido una crono bastante exigente, un poco más larga y más dura que el año pasado. Los rivales tenían un poco más de ventaja sobre mí hoy en este terreno y por eso he hecho la crono a tope.

 

Por suerte ha salido normal, lo suficiente como para no perder el liderato, y estoy muy contento por eso”, declaró el boyacense al finalizar la carrera, en la que superó en la clasificación general al holandés Bauke Mollema, del equipo Trek, y al antioqueño Rigoberto Urán, del Etixx-Quick Step, quienes completaron el podio, a 18 y 31 segundos, respectivamente.

“Gracias a mi equipo por esta buena semana. Y a todos ustedes por sus buenos deseos. El ciclismo colombiano presente”, señaló Urán en las redes sociales, satisfecho por haber sido protagonista en la carrera, así como Carlos Julián Quintero, del Team Colombia, quien se coronó campeón de los Premios de Montaña.

 

El triunfo de Quintana no fue uno más para su equipo. El Movistar quería la corona porque era una de las pocas de vueltas por etapas del World Tour que le faltaba. Ahora sólo tiene pendientes el Tour Down Under, Romandía y Polonia.

 

No obstante, el gran objetivo de la escuadra, y en particular de Nairo Quintana, es ganar el Tour de Francia. “Toda nuestra temporada está enfocada en llegar en el mejor nivel posible a la primera semana de julio. Las pruebas que correrá Nairo serán simulaciones de lo que se encontrará en el Tour. Esperamos que llegue enfocado y fuerte y que el equipo lo respalde tan bien como lo ha hecho hasta ahora”, señaló el director general Eusebio Unzué.