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El adiós de la leona Aymar, una reina sin corona de oro

Luciana en la Argentina está al nivel de Maradona, Fangio, Monzón, Ginóbili o Villas.

EFE
10 de agosto de 2012 - 06:07 p. m.
El adiós de la leona Aymar, una reina sin corona de oro

Dos medallas de plata y dos de bronce son un orgullo para cualquier deportista pero la argentina Luciana 'Lucha' Aymar se despidió de los olímpicos sin el tan deseado oro en Londres-2012, el último rugido de la reina leona.

El equipo de los Países Bajos, primero en el ranking mundial, fue un campeón inobjetable al vencer 2-0, mirándolo del derecho y del revés, y por eso no debería ser tan amargo el adiós de Aymar a los Juegos.Siete veces mejor jugadora del mundo según la Federación Internacional de Hockey (FIH), la emblemática volante de ataque también fue distinguida por la entidad rectora como Leyenda Viviente del hockey en 2008.

No fue el mejor regalo el día de su cumpleaños número 35 para la capitana de las campeonas del mundo perder la final con Holanda, un 'tifón naranja' que arrasó con el sueño de Las Leonas albicelestes. "Londres será mi último torneo", había anunciado la jugadora.

Se va con una cosecha impresionante de siete medallas en copas mundiales (dos de oro), las cuatro olímpicas (dos platas y dos bronces), nueve en el Trofeo de Campeones (cinco de oro) y Panamericanos (seis de oro y una de plata).

"No puedo dejar de pensar en la medalla de oro", había reconocido antes de los Juegos quien fue la abanderada de la delegación en la ceremonia inaugural.

La jugadora que le dijo adiós a los olímpicos la noche del viernes se ha convertido en una de los mejores deportistas argentinos de todos los tiempos.

En esa galería de la fama, Aymar comparte el cartel con el automovilista Juan Manuel Fangio, el boxeador Carlos Monzón, el tenista Guillermo Vilas, el futbolista Diego Maradona y el basquetbolista Emanuel Ginóbili.

Fue esa destreza asombrosa la que le valió el apodo de 'la Maradona del hockey'. El equipo de los Países Bajos, primero en el ranking mundial, fue un campeón inobjetable mirándolo del derecho y del revés, y por eso no debería ser tan amarga la despedida.

Pero la jugadora nacida en la ciudad de Rosario, cuna también de la superestrella del fútbol Lionel Messi quería irse a casa con el premio mayor, al cabo de la ambición de cualquier atleta que se precie.

Las Leonas cayeron ante un rival superior y no pudo aparecer en la alfombra azul del Riverbank Arena la magia con el stick de la rosarina.

Aymar y Las Leonas habían sido también derrotadas en semifinales en Pekín-2008 por Holanda, con la que Argentina juega cada tanto el mayor clásico del hockey femenino mundial.

Y otra vez fue el bronce en Pekín-2008, ganado a Alemania, la presea atrapada por las argentinas, como había sucedido en Atenas-2004. La otra de plata fue conquistada en Sídney-2000 al perder la final con las 'hockeyroos' de Australia.

Al cabo de esta historia, Argentina levantó su rendimiento en Londres-2012 al volver al segundo escalón del podio, lo que marca la madurez de su hockey.

Agradecía Aymar la noche del viernes con una sonrisa triste y algo de consuelo cuando un grupo de hinchas argentinos le cantaba el 'feliz cumpleaños' desde las tribunas, mientras un estadio colmado por miles de holandeses celebraba el oro. Los holandeses la ovacionaron también.

El DT, Carlos Retegui, había anticipado que "todos esperamos que Londres sea el mejor Juego Olímpico de Luciana. Todos los días hace algo increíble en los entrenamientos y tengo la ilusión de verla en el mejor nivel de su historia".

Pero no pudo ser. Aymar se retira de los olímpicos y tal vez del hockey, aunque no es seguro, porque puede llegar a sentir otra vez el impulso de manejar la bocha con su maestría en un Champions Trophy o en un Mundial.

Por EFE

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