El conjunto pijao ya se encuentra en semifinales de la Liga Águila. En su camino dejó al Once Caldas, en un partido emocionante que se resolvió en los últimos minutos, con marcador de 3-1 a favor de los locales.
El vinotinto comenzó ganando con tanto de Johnatan Estrada, a los 4 minutos, luego Caldas empató con gol de Jonathan Lopera, a los 41, y así se mantuvo hasta el minuto 92, marcador con el que clasificaba el equipo de Manizales. Pero en dos minutos el equipo de casa cambió la historia al anotar a los 92 y 94 por intermedio de Andrés Felipe Ibargüen y Didier Delgado.
Los números del equipo en esta campaña acompañan la ilusión: 10 partidos ganados, cinco empatados e igual número de derrotas que lo dejaron tercero en la tabla de posiciones. Después de haber levantado su nivel con el transcurso de los partidos, llegó a esta fase final en su mejor momento futbolística y emocionalmente.
Alberto Gamero, técnico del vinotinto y oro, sabe la importancia de volver a ser locales en su estadio, que ha sido en muchas oportunidades una fortaleza para las buenas campañas de los tolimenses. El regreso será un punto clave para lo que se viene en el futuro de la Liga: “Nos sentimos locales otra vez, un estadio así motiva a cualquier jugador a que no baje los brazos. Ojalá en la siguiente fase siga lleno. Ojalá se vuelva nuestro fortín”, aseguró el samario de 51 años de edad.
Unas de las armas que tiene el Tolima es nunca bajar los brazos en los partidos, como lo afirma Gamero: “El equipo siempre va al frente. Arriesgamos y fuimos a buscar el partido. No dejamos de correr los 90 minutos”.
Los laterales del equipo son fundamentales para el técnico samario: “Ellos son muy importantes para nosotros. Buscamos la subida de ellos para generar más peligro. Didier Delgado y Mateus Uribe se entienden perfectamente por al banda derecha”, concluyó.
Andrés Ibargüen, autor del segundo gol del conjunto pijao y goleador del equipo en esta temporada con 7 goles en 21 partidos jugados, afirmó que “este es un equipo que está comprometido con la hinchada. Este gol quedará guardado en el baúl de los recuerdos. Somos un equipo que juega bien y así es más fácil ganar. Estamos preparados para lo que venga”, dice el delantero que se ilusiona con seguir en carrera en el torneo nacional.
El jugador, de 23 años, se ha convertido en la gran figura del equipo en los últimos torneos. Jugador clave en la obtención del título de la Copa Colombia en 2014 contra Santa Fe, ahora esperar repetir, pero en la Liga, y aportar su fútbol y sus goles para poner la segunda estrella en el escudo de la institución.
Otro jugador clave ha sido el experimentado Jonathan Estrada. Con la calidad que demuestra el volante antioqueño el equipo ha mostrado su mejor versión futbolística, y ha sido importante en este repunte. El ex Millonarios, Patriotas, Medellín, entre otros, está cerca de cumplir un año en el club y ha convertido cinco goles en 36 partidos, y el más importante ha sido el del partido del sábado, que empató la serie frente al equipo de Manizales.
Las semifinales son el siguiente objetivo del equipo y con el buen momento que atraviesa el equipo y la vuelta a casa, el Tolima vuelve a estar en las grandes instancias del fútbol colombiano.