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Es peor ser suplente que errar un penalti: Fano

Habla el peruano Johan Fano, goleador de Itagüí, uno de los mejores equipos de este semestre.

El Espectador
12 de noviembre de 2012 - 12:05 a. m.
Johan Fano, goleador del Itagüí Ditaires
Johan Fano, goleador del Itagüí Ditaires

La nariz de Johan Fano está fracturada desde hace 18 años. Días antes de debutar con León de Huánuco, de Perú, recibió un cabezazo de un central, y cuando visitó al médico le auguraron una recuperación flemática.

Entonces decidió posponer la operación, pues nunca ha tenido mucho tiempo para perder en su carrera deportiva; por eso cuando jugó en Once Caldas (2009) se pegaba una banda de microporo sobre el tabique para respirar mejor en la cancha.

“Primero, me da miedo entrar al quirófano caminando y nunca levantarme: uno nunca sabe. Segundo: quedaría débil ante los defensas, podría entrar con miedo al área. Entonces tal vez me opere cuando me retire”, explica el goleador de Itagüí, equipo que iniciará su participación en cuadrangulares el próximo fin de semana, luego de clasificarse hace tres fechas. Y aún hacen falta unos años más para que se despida del fútbol.

“Me quedan, no sé, ¿tres años más? Ahora sólo pienso en quedar campeón con Itagüí y después veremos”, confiesa el delantero de 34 años en esta entrevista, en la que habla de todo: de por qué no lo han convocado a la selección de su país, sobre la superioridad del Barcelona actual con respecto al Brasil del 70 y de la censura a la “Mano de Dios” de Diego Maradona en 1986.

 

¿Primero estilo o resultado?
Hay que saber triunfar. No ganar por ganar. Cuando uno juega bien puede perder, es cierto, pero está cerca de conseguir más victorias consecutivas que derrotas. Diría que se debe analizar cómo obtener el resultado.

¿Entonces prefiere “perder un partido por nueve que nueve partidos por uno”?
Ah, sí, ¡claro! Esa frase explica todo lo que debe ser el fútbol.

¿Barcelona o Brasil de 1970?
Barcelona.

Si fuera Bielsa en Corea y Japón 2002, ¿Batistuta o Crespo?
Ambos, pero hubiese puesto a Batistuta a retroceder un poquito para que le llegasen más pelotas a Crespo.

Si es Sergio Markarián, ¿Claudio Pizarro o Johan Fano?
Johan Fano.

¿Por qué no lo volvieron a convocar?
El único que tiene la respuesta es Sergio y hay que respetarla. Si con los goles que estoy anotando en una liga competitiva como la colombiana no me llaman, entonces debo ser campeón con Itagüí.

¿Detractor o no del gol con la mano de Diego Maradona en el Mundial del 86?
Detractor. En el fútbol hay reglas y no hay que abusar para sacar ventaja. No se me ocurriría hacerlo.

¿Ha fingido al menos una falta?
No que recuerde.

Qué es peor: ¿ser suplente o errar un penalti?
Ser suplente; siempre quiero ser titular. Desperdiciar un penalti te da la posibilidad de seguir intentando. Si eres alternativa es porque no estás haciendo méritos y es difícil sentir eso.

¿Eso fue lo que sintió el semestre pasado en el Nacional de Santiago Escobar?
Exacto. Allí no tuve confianza; jugaba un partido y descansaba seis. Tampoco tuve suerte ni regularidad. Y un jugador necesita que lo arropen, como lo ha hecho Leo (Leonel Álvarez) conmigo.

¿Cómo lo convenció Leonel de que fuera a Itagüí?
Había mejores posibilidades económicas, pero él tenía muchos anhelos de tenerme en su equipo. Ya me había querido cuando dirigía al Medellín (2009). Entonces le di importancia al tema de la confianza y ahora se la estoy retribuyendo con goles. Y si no anoto, hago el trabajo sucio, como muchos dicen, para que otros lo hagan.

¿Así como “el mejor delantero del mundo sin balón”?
Claro, porque al 9 lo referencian más. Por eso hay que aguantar defensas, llevarme las marcas, pivotear, armar, asistir, y que los compañeros aprovechen espacios, como lo hizo Anderson Zapata (hizo dos goles el sábado contra Huila). Los únicos que valoran eso son los que saben de fútbol y tus compañeros.

¿Cómo es Leonel Álvarez de entrenador?
Para él no existen titulares ni suplentes. No hay preferencias. Incluso, a veces trabaja más con los alternantes que con los titulares. Eso es saber llevar un grupo. Además lee muy bien los partidos y sabe sortear adversidades como lesiones y expulsiones en un grupo tan reducido.

Pero también es un plantel experimentado. Eso ayuda.
Sí, somos un equipo fuerte por jugadores como Choronta Restrepo, Samuel Vanegas, Rufai Zapata. A través de nuestra experiencia vamos a llegar fortalecidos a cuadrangulares y allí habrá que ganarles a todos para ser campeones. Este conjunto ya aprendió de errores del semestre pasado.

¿Cuántos años más le quedan jugando?
El rendimiento no se mide por la edad. Uno no se gana el puesto por joven o viejo sino por resultados. Pero cuando me retire quiero terminar mis estudios de administración y tal vez ser mánager.

Por El Espectador

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