:format(jpeg)/www.elespectador.comhttp://thumbor-prod-us-east-1.photo.aws.arc.pub/joHEsMxQo8lt66HtXF66HMcvm3U=/arc-anglerfish-arc2-prod-elespectador/public/TJJC66HGWBHNBDS7NEC23DZULQ.jpg)
La cara de Gustavo Costas al llegar a la sala de prensa del estadio Metropolitano de Techo lo dejaba claro: el empate fue como un triunfo para Santa Fe. Y es lógico, su equipo perdía 1-0 con el Deportivo Independiente Medellín (gol de penal de Cristian Marrugo), jugaba con un hombre menos, tras la expulsión de Leybin Balanta, pero con un buen nivel y sobre todo actitud, equilibró el marcador con un gol del venezolano Juan Manuel Falcón. Ahora el cuadro cardenal piensa en la final de la Recopa Suramericana ante River Plate, este jueves en Buenos Aires.
“Felicité a los muchachos en el camerino. Demostraron una gran actitud, sobre todo en la segunda parte. Estoy satisfecho con el rendimiento del equipo y creo que al final nos costó un poco en la parte física, porque obviamente jugamos con un hombre menos gran parte del partido, y eso cobra”, destacó el técnico argentino, quien utilizó una nómina en su mayoría suplente, pensando en el juego por la Recopa. Sin embargo, los futbolistas que actuaron fueron de nivel, como para pelearle al actual campeón de Colombia, el DIM.
Varios de los que tuvieron la oportunidad de actuar demostraron que merecen tener mayor continuidad y perfectamente podrían ser titulares en los partidos de copas internacionales. Por ejemplo, el defensor central Javier López tuvo un gran rendimiento. Gracias a su estatura es muy seguro en el juego aéreo defensivo y un arma letal en la pelota quieta, por lo general siempre gana cuando va por arriba. Otro para destacar es el volante Leonardo Pico, quien llegó este semestre como refuerzo proveniente del Patriotas. En la segunda parte se juntó con Kevin Salazar y generó fútbol: justamente lo que más le ha costado hacer a Santa Fe en los últimos partidos. A propósito de Kevin Salazar, el juvenil demostró que no puede ser tenido en cuenta sólo para actuar minutos al final de los partidos, sino que tiene para actuar desde el arranque, siempre. Él le da otra dinámica al juego cardenal y deberían apostarle desde ya a su talento, mucho más ahora, cuando Ómar Pérez no es el mismo de antaño. “Kevin tuvo un gran partido, quizás el mejor desde que estamos acá. Quedo muy contento y lo felicito”, culminó Costas.