Entristecido y cabizbajo entró el técnico de la selección Colombia a la conferencia de prensa, tras el partido que el equipo nacional perdió 1 – 2 en el estadio Metropolitano de Barranquilla.
¿Qué lectura hace del partido?
Enfrentamos a una Argentina que, desde el inicio, no vino a meterse atrás, sino a proponer. Colombia se supo replegar, y no tuvo un comienzo muy bueno, debido al manejo de ellos de la pelota y del espacio. Así y todo, a través de orden y concentración, tuvimos momentos buenos en el primer tiempo, que fue muy parejo, aunque llegamos más que ellos. Teníamos el temor de enfrentar a un jugador como Messi, que marca la diferencia. Y, sin embargo, nos vamos adelante en el marcador. Sabíamos que en el segundo tiempo, intentarían empatar, y debíamos ser certeros en manejar el balón y aumentar el marcador en los contragolpes que íbamos a tener. El equipo acusó cansancio y, desde luego, no tuvo el manejo que se necesitaba para este segundo tiempo, en el que Messi marcó además una diferencia, sin tener la claridad de muchos otros partidos. La variante que hacen del otro delantero, y hacer retroceder a Messi, confundió a los muchachos, y no supimos administrar el balón. Pudimos empatar, con Zúñiga, pero bueno, ellos concretaron más, de dos opciones metieron dos.
¿Es Barranquilla el lugar indicado?
Siempre será una plaza muy importante. Me da pena, y dolor, porque es una ciudad que merecía ver a su selección ganar. El anhelo era vencer y dedicarles el triunfo con amor y cariño. Ahora hay que tener cabeza arriba, fortaleza, trabajar y seguir creyendo en lo que se está haciendo. Es una eliminatoria difícil, complicada, y hay que apoyar a los muchachos.
¿Se mantendrá Barranquilla como sede?
Estamos muy tristes, porque queríamos darles un triunfo, a una ciudad que nos acogió y que nos entregó mucho respaldo. Lo que pasa es que hay que saber jugar acá. En este calor hay desgaste y correr sin balón te va cansando. Miren que en esto tenemos que trabajar muchísimo más, porque esta es una muy buena plaza, pero los hinchas no pueden meterse a jugar. Teniendo el balón, lo regalamos, y si se lo dábamos a jugadores como Messi o Agüero, hacen daño. Lo único que queda con los Argentinos es felicitarlos. Hay que reconocer cuando una selección maneja el balón de esa manera. Nos hizo retroceder. Y fuimos al frente y no nos alcanzó para el empate, aunque antes habíamos tenido para irnos adelante.
¿Se podría complicar su continuidad al frente del cargo?
Estoy seguro de lo que estoy haciendo. Tengo una responsabilidad con el país, con los jugadores, con los directivos. Esto es de resultados. Hoy sos bueno, mañana malo, pasado regular, después otra vez bueno. Ahora, más que nunca, hay que tener tranquilidad, y levantar la cabeza. Ganar de local es necesario, importante. Lo había dicho antes, había que cuadrar caja hoy. No se logra. Habrá que recuperar estos puntos en otras plazas, como lo hizo hoy Argentina, entonces hoy Sabella es grande, inmenso. Antes del partido era remalo. Eso es el fútbol. Como dije, hay que seguir creyendo en lo que se está haciendo. En ningún momento se toman decisiones con mala intención. Es siempre buscando lo mejor para Colombia.
¿Este tropiezo empieza a complicar la clasificación?
En esto hay que ganar de local, pero también por fuera. Argentina, de seis, hizo cuatro. Hoy vino a buscar un resultado, y se encontró con una Colombia muy bien parada en el primer tiempo. No supimos administrar las situaciones que teníamos para mantener el resultado, y se llevan una victoria merecida, y cuadran caja. Tenemos que creer en lo que hemos hecho y, como dije, habrá que salir a buscar los tres puntos afuera.
¿No fue desacertado sacar a Abel Aguilar, que venía haciendo un buen partido, por Diego Arias?
Acepto el comentario. Desde la tribuna, se puede apreciar de una mejor manera. Abel se sentía muy cansado. Hablé con él y me dijo que estaba fatigado por el manejo que estaba dando Argentina, y porque nosotros propiciamos esos contragolpes, que eran a favor de nosotros, ellos se partían, quitaban el balón e inmediatamente se lo daban a Messi, que con lo poquito que hizo, hizo muchísimo. Si él hubiera estado en un nivel más alto, imagínese. No fuimos fuertes en saber manejar la pelota. Volviendo a la pregunta, cuando entro a Abel, nos empatan. Quería aguantar un poco y terminar con ese 4-1-4-1, pero después había que arriesgar. Y lo acepto. Soy el único responsable de este resultado. Los muchachos se entregaron al máximo, y no tengo ningún reparo. Al contrario, hoy más que nunca me siento muy fuerte, porque sé lo que quiero. No queda más que levantar la cabeza, buscar los resultados y recuperar la credibilidad. Como dije, es una eliminatoria larga y difícil. Creería que son las más difíciles que se van a jugar en mucho tiempo. Y hay que dar más de lo que tenemos.
En este tiempo que tendrá para pensar, ¿considerará un cambio en el esquema táctico?
Manejamos el 4-1-4-1, y el 4-4-2 de local, porque en casa uno debe arriesgar más, asumir riesgos. No voy a cambiar en eso. Y cuando no se logran los resultados, se dice que siempre faltó el otro módulo, como también hizo falta quien no estuvo. Sin embargo, es para seguir trabajando esos dos esquemas, y pensar en un jugador que dé manejo, porque acá en Barranquilla hay que tener el balón, independientemente del módulo. Y, claro, ser muy certeros en las opciones que tengamos. Habrá que cambiar, según el momento.