El clásico del fútbol argentino entre el Boca Juniors y el River Plate fue suspendido este domingo a los 10 minutos, cuando igualaban a cero, a causa de la intensa lluvia que azota a Buenos Aires.
El árbitro Héctor Baldassi decidió interrumpir el encuentro cuando el agua impidió que el balón se deslizara con normalidad en el campo de juego del estadio 'La Bombonera', al que asistieron unos 48.000 espectadores.
Los jugadores pidieron al árbitro que permitiera la continuidad del encuentro, o que esperara algunos minutos a que cesara la lluvia, pero éste indicó que era imposible debido a que las líneas del rectángulo de juego ya no eran visibles.
Esta es la primera vez que un derbi entre los conjuntos más populares de Argentina se suspende una vez comenzado desde el primero que disputaron en 1910.
Fuentes de la Asociación del Fútbol Argentino (AFA) comentaron a Efe que el partido podría reanudarse a mediados de esta semana.
El choque correspondiente a la décima jornada del torneo Clausura 2010 del fútbol argentino enfrentaba a dos equipos en crisis, necesitados de una victoria para aliviar los males que les apearon tempranamente de la lucha por el título.
El River Plate ocupa el décimo puesto con 12 puntos y está a ocho de distancia del líder Independiente de Avellaneda, mientras que el Boca Juniors, que sólo superó al Lanús en la segunda jornada, suma apenas ocho y está a tres del colista Atlético Tucumán.
Otro de los atractivos del clásico es la posibilidad de que el delantero Martín Palermo se convierta en el máximo goleador en la centenaria historia boquense.
Palermo igualó el día 3 de este mes la marca de 218 tantos establecida por Roberto Cherro en 1938.