Boca e Independiente repartieron goles y emociones

Santiago Silva marcó uno de los goles del equipo 'Xeneize' ante los 'Diablos rojos'. / AFP

Boca Juniors e Independiente igualaron 3-3, en un entretenido partido de ida por la llave de equipos argentinos, correspondiente a la segunda ronda de la Copa Sudamericana, este miércoles en el estadio La Bombonera, en Buenos Aires.

El uruguayo Santiago Silva (16), Leandro Somoza (45) y Juan Sánchez Miño (76) convirtieron los goles de Boca, y Jonathan Santana (44), Rosales (48) y Ernesto Farías (90+1, de penal) anotaron para Independiente.

El resultado dejó mejor parado a Independiente con miras a la revancha que se jugará el 29 de agosto, ya que a los ‘Diablos Rojos' les bastará con ganar o empatar en cero, uno o dos goles para hacer valer los tantos anotados como visitante para pasar a la próxima etapa del certamen.

Independiente llegaba a este encuentro agobiado luego de perder el clásico de Avellaneda contra Racing (2-0), y una racha de diez partidos sin triunfos que ponía en serio riesgo la continuidad del entrenador Cristian Díaz.

Sin embargo, como le sucedió en el Torneo Clausura pasado, cuando se impuso 5-4, también en la Bombonera y en otro duelo electrizante, el ‘Rojo' salió airoso de un desafío muy complicado, ante un Boca que exhibió notorios desajustes defensivos.

Y eso que el comienzo fue más que adverso para los de Avellaneda, pues Patricio Vidal no pudo convertir en una situación muy favorable, y casi de inmediato, el uruguayo Silva aprovechó un grosero error de Leonel Galeano para vulnerar a Navarro y adelantar en la cuenta a Boca.

Durante un buen rato, Boca tuvo posibilidades para aumentar la cuenta, al mismo tiempo que Independiente buscaba el empate, pero dejaba grandes espacios en el fondo que el local no terminaba de aprovechar.

Casi en el final de la primera parte, Vidal envió un centro desde la izquierda y Santana le ganó en el anticipo a Rolando Schiavi para anotar el 1-1, pero la alegría le duró un suspiro al ‘Rojo', porque en la acción siguiente, Silva defendió la pelota en la puerta del área visitante y cedió para Somoza, que estampó un remate inatajable para el 2-1 local.

Sin embargo, Boca no aprendió de sus equivocaciones y volvió a pagar caro sus errores, con el empate que anotó Rosales con un toque certero desde el borde del área, luego de capturar un rebote que dio el arquero D'Angelo en una floja salida.

Para colmo, el local se vería muy complicado con la expulsión de Schiavi, que redondeó una noche fatal con dos infracciones muy fuertes sobre Farías que le costaron la tarjeta roja.

El partido cambió e Independiente estuvo cerca de pasar al frente, pero D'Angelo se redimió con una salvada espectacular, al desviar a puro reflejo un cabezazo de Farías dentro del área menor que amenazaba con darle el triunfo a la visita.

Pero Boca volvió a ponerse una vez más adelante en el tanteador, con un fantástico tiro libre del joven Sánchez Miño, aunque al equipo auriazul se le haría cuesta arriba mantener la ventaja alcanzada.

Independiente advirtió en otra gran acción de Farías, que remató al travesaño, y en el último minuto, Clemente Rodríguez le cometió un penal al mismo delantero de Independiente, que no dejó pasar la ocasión y remató esquinado para el 3-3 definitivo, en otro clásico picante, que promete más emociones en un desquite a todo o nada.