Los siete puntos que había en las cuentas del técnico de la selección Colombia para cuando terminara la cuarta jornada de las eliminatorias a Brasil 2014 fueron 'descuadrados' duramente el martes en Barranquilla.
La ilusión de ver a Colombia en la parte alta de la clasificación de las eliminatorias se esfumó cuando a Argentina se le 'antojó' jugar en el Metropolitano.
Messi, desaparecido durante la última media hora de juego del primer tiempo, lideró exitosamente en el complemento la avanzada argentina que volteó merecidamente el marcador ante más de 50 mil colombianos atónitos y estupefactos en las tribunas, además de los 11 que estaban en la cancha de juego.
Y es que como buen anfitrión se portó Colombia tan pronto inició el partido en Barranquilla. El equipo nacional ‘le prestó’ a Argentina la pelota y esperó la propuesta del visitante, pero cuando vio que el bicampeón del mundo había llegado con las manos vacías al Metropolitano y con tanque de oxígeno para apenas 15 minutos, entonces le aplicó la premonición de Leonel Álvarez: lo irrespetó en la cancha.
Cuando se bajaba el telón del primer tiempo (m. 44) Dorlan Pabón plasmó en el marcador la superioridad colombiana de la última media hora. Un remate del '11' de Colombia quiso atravesar un mar de piernas en el área y salir por la última raya del campo, pero la de Javier Mascherano se interpuso y lo desvió al fondo de la red.
Fue el broche perfecto para un primer tiempo en el que Colombia tuvo dos claras oportunidades de abrir el marcador y dejó atragantado el grito de gol en las miles de almas presentes en las graderías.
Por eso el tanto de Pabón provocó el clímax en la tribuna barranquillera que en un principio tuvo que ver con uñas en la boca como Lionel Messi alcanzó a divertirse unos minutos con el balón y dar destellos de lo que hace cada ocho días con el Barcelona, pero el sol, el calor y la humedad de Barranquilla empezaron a hacer efecto antes de que el '10' de Argentina afinara su 'varita mágica'. Ya cuando las fuerzas se agotaron, el mejor jugador del mundo fue un espectro durante el tiempo que restó de ese primer tiempo.
Pero los 15 minutos del entretiempo fueron un bálsamo para ese agotado equipo argentino que envió a la cancha a Sergio Agüero y armó un tridente de lujo en el ataque con el ‘Kun’, Messi y Gonzalo Higuaín.
Volvió entonces el dominio a placer de Argentina y esta vez no sólo duró 15 minutos, sino todos los 45. De hecho, justo cuando caía el primer cuarto de hora del segundo tiempo despertó el ‘gigante’.
Messi recogió un balón en el borde de área, abrió a José Sosa y este último centró a ras de piso para que entre Mario Yepes y David Ospina dejaran el esférico rifado a un '10' albiceleste que entró como 'Pedro por su casa' y puso la igualdad.
Colombia sintió el gol, Argentina lo notó y por eso fue por el 'knockout' ante un rival que perdió el orden del mediocampo y de ese modo la marca sobre el inquietante Messi.
A Colombia se le agotaron las fuerzas y los pulmones frescos de Carlos Darwin Quintero, Dayro Moreno y Diego Arias, llegados desde el banco, no surtieron el efecto esperado.
El equipo colombiano era empujado por el aliento del público y por un Leonel a todo pulmón desde la raya. Pero eran ahora los de camiseta amarilla los que sufrían las inclemencias del clima barranquillero.
Cuando el telón del partido empezó a caer el tridente argentino se encontró con una pelota en el medio campo y todo un terreno para avanzar sin presión alguna.
Por eso la jugada que inició Messi, que continuó Higuaín y que concluyó Agüero para poner el segundo de Argentina fue esquiva en todo momento para la zaga colombiana, que se limitó a ver cómo Ospina desviaba un balón de gol, pero para que llegara el 'Kun' y silenciara la tarde no sólo de Barranquilla, sino de Colombia entera e hiciera aún más escabroso el camino a Brasil 2014.