Publicidad

Hubiera preferido evitar a Santa Fe

El argentino llegó hace dos semanas al equipo rival del cuadro cardenal en los octavos de final de la Copa Libertadores.

Daniel Avellaneda, BUENOS AIRES
03 de mayo de 2015 - 05:15 p. m.
El técnico Gabriel Milito, de 34 años de edad. Cortesía Prensa Estudiantes de La Plata
El técnico Gabriel Milito, de 34 años de edad. Cortesía Prensa Estudiantes de La Plata

Fue hace tres años, en Chapadmalal, a 20 kilómetros de Mar del Plata, durante una pretemporada de Independiente. Entonces, Gabriel Milito regresaba del Barcelona, nada menos, para retirarse con la camiseta que lo marcó durante su carrera en Argentina. Y la nota, claro, tenía que ver con su pasado europeo y el desenlace de sus días como zaguero central. Aunque, entonces, ya marcaba una tendencia desde esa filosofía que adquirió de la mano de Pep Guardiola: “En el fútbol argentino parece que hay que ganar a cualquier precio y de cualquier manera. Soy un convencido de que si no jugás bien, podés ganar un día, quizás otro; pero no te alcanza para pelear arriba”.

Hoy, el Mariscal ya no es aquel zurdo elegante que jugó en los “Diablos Rojos”, equipo con el que ganó el Torneo Apertura 2002, Zaragoza y el Barça, pero conserva los ideales. Después de dirigir la reserva de Independiente y renunciar por conflictos con los dirigentes, es el técnico de Estudiantes de La Plata, rival de Santa Fe en los octavos de final de la Copa Libertadores, este martes (6:45 p.m) Y su presencia en el banco de los “pincharratas” hizo ruido en la ciudad, porque Milito está identificado con Guardiola y choca con el estilo de Carlos Salvador Bilardo, ícono de los albirrojos. Claro que Juan Sebastián Verón, máximo ídolo como jugador, ahora en su rol de presidente, confió en este joven técnico al que conoció en la selección de Argentina.

Milito llegó hace apenas dos semanas, cuando los resultados empujaron por el abismo a Mauricio Pellegrino. La Bruja decidió despedirlo después de la derrota con Tigre en el campeonato doméstico. Gaby debutó en Guayaquil ante Barcelona —justo él, vaya paradoja— y clasificó a su flamante equipo a la siguiente fase del torneo continental. A los 34 años se transformó en el entrenador más joven del campeonato. Y si de rótulos se trata, tendrá morbo el duelo entre el Guardiola argentino y el Mourinho colombiano, más allá de que Gustavo Costas haya nacido por estas tierras, claro. Aunque también podría hablarse de dos estrategas criados en las antípodas de Avellaneda, uno en Independiente, el otro en Racing Club. Sobran atractivos para este choque copero de los octavos de final. Y en la previa charla con El Espectador.

¿Qué partido imagina ante Santa Fe? ¿Era la llave que hubiera esperado?

La eliminatoria es complicada. Hubiera preferido evitar a Santa Fe. Es el campeón colombiano, se clasificó en una buena posición y terminamos definiendo en Colombia, donde no es fácil ganarle. Pero forma parte de los desafíos que vamos a tener todo el tiempo. Entonces, cuanto más preparados estemos, más cerca estaremos de conseguir los objetivos que nos proponemos.

¿La clave puede estar en tratar de controlar a Ómar Pérez, la figura de Santa Fe?

No sólo él, tiene varios jugadores de jerarquía, especialmente de mitad de cancha hacia delante. Ómar Pérez es el más importante, es el último pase, hace la pausa necesaria y Santa Fe juega al compás suyo, pero también tiene gente veloz en ataque. No podemos descuidarnos.

¿Y qué opinión tiene de Costas, un técnico que ganó tantos campeonatos?

Sin dudas Costas es muy bueno. No es fácil dirigir en el exterior y ha sido campeón en todos los países donde ha dirigido. Obviamente, tiene mucho mérito lo que está haciendo, prepara muy bien a sus equipos, tiene una propuesta valiente y busca atacar siempre.

¿Imagina que Santa Fe saldrá a atacar en La Plata?

Tiene futbolistas con características para atacar. Vamos a ver cómo se da el partido. Estudiantes debe tener claro cómo jugar con la pelota y sin ella. Y hacer la diferencia acá para viajar a Colombia con algo de tranquilidad.

En muy poco tiempo, asumió y le cambió la cara a Estudiantes, además de lograr la clasificación a la próxima fase de la Copa. ¿Cuál es el secreto?

Creo que los jugadores captaron rápido el mensaje. Y en el fútbol hay muchos factores, aunque uno muy importante es el anímico, y venían de algunos golpes. Trabajamos sobre ese aspecto y sabemos la mística que tiene este club en la Libertadores.

¿Cuánto influyó que lo llamara Juan Sebastián Verón, con quien compartió la selección de Argentina, en su decisión de aceptar el cargo de entrenador de Estudiantes?

Varios fueron los motivos para elegir a Estudiantes. Uno de ellos fue la presencia de Verón como presidente. Sebastián sabe lo que pienso y sé lo que piensa él. También fue muy importante la calidad del plantel, porque cuenta con futbolistas capacitados para desarrollar nuestras ideas. Y no le pedimos nada raro.

¿Y cuál sería su idea futbolística?

Intensidad y orden a la hora de recuperar la pelota. Atacar con orden y defender con orden. Eso es lo principal. También llegarle al jugador, convencerlo. Queremos que el equipo entienda el mensaje. Antes de asumir me quedó claro que hay material para jugar como queremos. Y hay otro punto fundamental: tenemos que hacer un equipo competitivo que represente a este club.

Usted es un hijo dilecto de Guardiola. ¿Cuánto tiene de Pep y piensa incorporarlo en Estudiantes?

Guardiola fue un gran entrenador para mí, un técnico magnífico y aprendí mucho de sus enseñanzas. Sin dudas, tengo un montón de conceptos que adquirí del tiempo que me dirigió en Barcelona. Pero, también, de otros técnicos. Mi idea siempre fue ser entrenador y por eso tomé lo mejor de cada uno de ellos para poder volcar mi idea en el campo de juego.

Dice que aprendió mucho de otros entrenadores, pero, ¿el que lo marcó no fue Pep?

Para mí hubo un antes y un después de mi paso por Barcelona sobre una manera de entender el juego. Y él fue mi entrenador por tres años. Y más allá de la idea, lo que más rescato de esta convivencia de tres años es la forma en que nos pedía competir. Todos se involucraban, todos trabajaban parejo y por igual, es algo que me marcó, es una de las cosas que intento inculcarles a mis jugadores.

¿Y cómo podría volcarse esa filosofía guardiolista a un club como Estudiantes, cuyo principal ícono es Carlos Salvador Bilardo?

Quiero hacer mi propio camino. Trabajo y dedicación no van a faltar. Mi compromiso es brutal y soy un fanático de la estrategia. Si la historia de Estudiantes corresponde a todo eso, vamos bien, no va a haber ningún problema.

También fue dirigido por José Néstor Pékerman, hoy entrenador de la selección de Colombia. ¿En qué lugar de su carrera lo pondría?

En un sitio de preponderancia. Fui dirigido por Pékerman en la etapa formativa, la más importante de mi carrera, y todo ese aprendizaje que tuve de su mano me acompañó a lo largo de mis años de futbolista; muchas de esas cosas son las que empecé a aplicar como entrenador: respeto por el rival, competir con humildad, hacer bien las cosas y estar en los detalles. Eso es lo que pienso para este momento de Estudiantes.

¿Considera que José revolucionó el fútbol colombiano?

Está haciendo un proceso muy bueno. Llegó con la eliminatoria comprometida, clasificó a la selección al Mundial de Brasil y dejó una muy buena imagen. José es distinto. Y cuando un técnico de tanta jerarquía está delante de un equipo, las cosas buenas terminan ocurriendo. Pékerman es un entrenador muy preparado, de mucho recorrido, un gran entendido del juego.

Es uno de los entrenadores más jóvenes del continente, ¿le puede jugar en contra su edad a la hora de manejar a futbolistas grandes?

Es cierto que soy un entrenador joven, pero si acepté este desafío es porque me siento preparado. El manejo con los jugadores grandes no representa ningún problema para mí, porque creo en las relaciones humanas y en estar cerca del futbolista. Por supuesto, el que manda y decide es el entrenador porque, de otro modo, esto sería ingobernable. Pero me gusta intercambiar ideas.

Por Daniel Avellaneda, BUENOS AIRES

Temas recomendados:

 

Sin comentarios aún. Suscribete e inicia la conversación
Este portal es propiedad de Comunican S.A. y utiliza cookies. Si continúas navegando, consideramos que aceptas su uso, de acuerdo con esta política.
Aceptar