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No era tarea fácil sacar un buen resultado en Brasil, pero había con qué. Santa Fe viajó a Porto Alegre con la ventaja del 1-0 de la semana pasada en El Campín y la ilusión de clasificarse por tercera vez a una semifinal de la Copa Bridgestone Libertadores de América, tras las que jugó en 1961 y 2013.
Pero al equipo, ese mismo al que le sobró actitud anoche en el estadio Beira Río, le faltó un poco de fútbol y algo de suerte, porque sin duda la serie de cuartos de final ante el Internacional tomó al plantel albirrojo en una curva descendente en su rendimiento. Ómar Pérez y Daniel Torres no brillaron como en otras ocasiones y sin su liderazgo Santa Fe quedó a la deriva durante varios pasajes del doble enfrentamiento ante los brasileños.
Y la suerte no ayudó. En Bogotá pudo haber ganado por uno o dos goles más, pero los palos lo impidieron. Y anoche permitió un gol demasiado temprano, apenas habían transcurrido dos minutos de juego cuando el defensa Juan, de golpe de cabeza, había igualado la serie.
Después los cardenales reaccionaron y, aunque no generaron verdadero peligro en el arco rival, por lo menos le quitaron la pelota al Inter y le manejaron el ritmo del partido.
En la etapa complementaria los locales arremetieron, pero Santa Fe se supo defender. El problema es que no propuso mucho en ataque, porque Ómar Pérez no estuvo claro como de costumbre y porque Wilson Morelo, el desequilibrante delantero, fue individualista e ignoró a sus compañeros en todas las acciones que tuvo para inquietar a la zaga brasileña.
El equipo que dirige Gustavo Costas se quedó con nueve hombres, por las expulsiones de Dairon Mosquera y Yulián Anchico. Aún así el campeón de Colombia aguantó el resultado.
Pero cuando parecía que la serie se definiría por cobros desde el punto penalti llegó el 2-0 definitivo, a tres minutos del final. Fue tras un cobro de tiro de esquina mal sancionado por el árbitro peruano Víctor Carrillo. Cobró el argentino Andrés D’Alessandro y Rafael Moure tocó la pelota antes de que ésta fuera desviada por el volante Baldomero Perlaza y se fuera al fondo de la red.
Con dos jugadores menos Santa Fe tiró los restos, pero ya no había ni tiempo ni condición física para lograr la hazaña. El cuadro cardenal peleó hasta el final, murió con las botas puestas y se quedó con las manos vacías en un semestre que hace apenas 15 días pintaba muy bien, pues también fue eliminado de la Liga Águila.
En los próximos días el técnico Gustavo Costas definirá si continúa o no en el club. Tiene contrato hasta el 30 de junio y varias ofertas del fútbol mexicano. Si avanzaba en la Libertadores era casi seguro que se quedaba, pero luego de la derrota de anoche puede que quiera tomar nuevos rumbos.
En el plantel también habrá cambios, aunque no demasiados. Hay varios jugadores que no han cumplido con las expectativas y el presidente César Pastrana tiene claro que debe armar un plantel para volver a pelear el título local y ser protagonista de la Copa Sudamericana, en la cual participará como ganador de la Superliga Colombiana, ante Nacional.
La delegación albirroja regresará este jueves a Bogotá y saldrá a vacaciones hasta la segunda semana de junio, cuando iniciará la pretemporada para el segundo semestre del año.
Alineaciones:
Internacional: Alisson; William, Ernando, Juan, Geferson(Rafael Moura. Min. 84); Dourado, Aránguiz, D'Alessandro, Sasha (Valdívia. Min.14); Nilmar y Lisandro López. D.T. Diego Aguirre.
Independiente Santa Fe: Leandro Castellanos; Yulián Anchico, Yerry Mina, Francisco Meza, Dairon Mosquera; Daniel Torres, Juan Daniel Roa, Luis Manuel Seijas, Ómar Pérez(Baldomero Perlaza. Min. 80); Luis Páez (Yamilson Rivera. Min.46) y Wilson Morelo (Otálvaro). D.T. Gustavo Costas.
Goles: 1-0 Juan; 2-0 Autogol de Mina
Expulsados: Dairon Mosquera (Santa Fe), Yulian Anchico (Santa Fe).