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Después de convertir el primer gol con la Juventus el pasado fin de semana en el derby de Turín, Juan Guillermo Cuadrado inició desde el banco en el partido de este martes por Liga de Campeones contra el Borussia Mönchegladbach.
El mediocampista colombiano ingresó al minuto 63 por Dybala, pero poco pudo hacer para que su equipo que empataba 1-1 se fuera de Alemania con tres puntos que lo hicieran mantener la primera plaza del grupo D del torneo de clubes más importante de Europa.
En la primera parte del encuentro, los primeros 20 minutos fueron para el Gladbach, que logró sortear el planteamiento del Juventus, que trataba de presionar en la mitad contraria buscando pérdidas de balón.
La primera ocasión clara se dio en el minuto 14 con un remate al larguero de Dahoud. Cuatro minutos después llegó el gol del equipo local, marcado por Fabian Johnson con un remate dentro del área a pase del brasileño Raffael.
La jugada estuvo precedida de un centro desde la banda izquierda de Oscar Wendt que Giorgio Chellini no alcanzó a interceptar. La pelota la recibió Raffael en el centro del área y este la cedió a la derecha al mejor ubicado Johnson, que definió con un disparo al segundo poste.
El gol pareció despertar a la Juventus, que intensificó la presión adelantada y logró dificultarle la salida al equipo alemán. Las dos primera llegadas claras fueron en situaciones con balón parado, en el minuto 26 con un remate de cabeza de Chellini y el 39 por intermedio de Evra, también de cabeza.
Pogba había estado desaparecido del partido pero surgió en el momento preciso, en el minuto 43, para lanzar un gran pase al área, por encima de la defensa del Gladbach, al suizo Lichtsteiner que definió con un remate de primera.
El segundo tiempo arrancó con una fase en la que la Juve metió al equipo local en su propia mitad. El asedio era asfixiante. Un remate ligeramente desviado de Pogba en el 47 dio una alarma.
Después vinieron una serie de saques de esquina seguidos y todos produjeron cierta zozobra. El Gladbach no lograba salir de su propia mitad y el segundo gol del Juventus parecía ser cuestión de tiempo. Sin embargo, en el minuto 54 se dio una circunstancia que le cambio la cara al partido.
El cuadro alemán trataba de salir de su propia mitad y la visita trataba de recuperar el balón en el área contraria. En ese contexto, Hernanes se lanzó en plancha hacia Álvaro Domínguez y llegó tarde ante lo que el árbitro, el holandés Björn Kuipers, lo expulsó dejando al campeón italiano con un hombre menos.
Tras la expulsión, la Juventus retrasó sus líneas lo que le permitió desahogarse a los locales y, a medida que pasaron los minutos, tomó la iniciativa y generó acciones ofensivas de cierto peligro.
En el 64 Johnson tuvo una buena ocasión a centro de Wendt. En el 77 Buffon reaccionó con una gran parada de pie ante un cabezazo de Lars Stindl y en el 88 logró desviar al larguero un disparo desde fuera del área de Thorgar Hazard.
La Juventus hacía tiempo que había empezado a apostar por el empate. El síntoma más claro fue la salida del campo en el minuto 75 de Alvaro Morata para darle paso al defensa Andrea Barzaghli.
Al final, al Gladbach no le alcanzó para la victoria ante un rival que sólo hizo verdaderos méritos en los diez primeros minutos de la segunda parte.