Jugando de titular, James convirtió en la victoria del Real 2-0 ante el Espanyol

El Real Madrid de Zinedine Zidane no falló en Cornellá, venció al Espanyol por 0-2 y con ello igualó el récord de 16 victorias ligueras consecutivas que tenía fijado el Barcelona de Pep Guardiola de la temporada 2010-11.

Misión cumplida para el conjunto madridista en su primer traslado del año a la Ciudad Condal. Pese a acudir sin el luso Cristiano Ronaldo ni el galés Gareth Bale, ambos con problemas físicos, y aunque no jugó ni mucho menos a un gran nivel, ganó al final con cierta autoridad para continuar con el pleno.

Conocedor de las goleadas el sábado del Barcelona ante el Leganés y del Atlético frente al Sporting, el Real Madrid resistió la presión sin sus dos grandes referentes ofensivos con dos goles de otras dos de sus figuras, el colombiano James Rodríguez y el francés Karim Benzema.

Con una primera parte sin muchas ocasiones de gol, James no defraudaría la confianza que le otorgaba su entrenador y a pocos minutos del pitazo final mostraría toda su calidad y le entregaba la victoria momentánea al Real Madrid.

El colombiano con el balón en sus pies luchó ante la defensa rival y con el arco de frente, remataria de media distancia y pondría la pelota al palo izquierdo del portero local. 1-0 y todas las miradas sobre James Rodríguez.

Cerca de la hora de juego Benzema rozó el gol con una gran maniobra en una jugada que él mismo inició. Tras una dejada de Asensio se colocó el balón con un toque y sin dejarlo caer disparó de volea, pero su antiguo compañero Diego López exhibió reflejos y despejó el peligro.

Diez minutos después el francés no perdonó en su segunda ocasión. Tras una jugada muy bien ensamblada, Lucas Vázquez centró desde la derecha y Benzema entró con potencia para marcar al primer toque.