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La sonrisa volvió a la cara de José Pékerman. En la rueda de prensa se le vio tranquilo, sin afanes, sus ojos brillaban. Colombia volvió a enamorar, volvió a ser el equipo que alegraba con su juego, que dominaba y creaba opciones, que hacía gritar a la tribuna: "¡Ole!". Eso lo tenía claro el argentino. Por ello sus gestos, su postura y expresiones eran las de un hombre feliz, su plan contra Ecuador funcionó a la perfección.
"Tenemos que reconocer el trabajo de los jugadores en la fecha doble. Hicieron las cosas de una forma excelente. Se merecen el elogio por un partido que se jugaba ante un buen rival, un Ecuador crecido, que había ganado los seis puntos de visitante y estaba rectificando porque estaba en la parte alta de la tabla. Eso valida lo que hizo Colombia, estoy feliz por eso y sin duda el resultado pudo ser más amplio", dijo Pékerman.
Durante el partido se le vio tranquilo. Cuando salía del banquillo técnico daba unas instrucciones y miraba el funcionamiento del equipo. Pero esta vez su diálogo no fue tan insistente como en La Paz, en esta ocasión estaba más sereno. Se le veía confiado. "Los resultados no nos acompañaron anteriormente, pero siempre tuve claro lo que esta selección es capáz de ofrecer. La dificultad de esta eliminatoria ha demostrado que ningún equipo se va a ver más fuerte que otro, la tendencia siempre se mantendrá. Es muy pareja. Nosotros hemos tenido problemas porque se cambiaron muchos jugadores, no obstante, nunca se ha perdido la paciencia, hay que apoyar a los jugadores y hoy los jugadores demostraron el buen juego que pueden llegar a ofrecer", indicó el entrenador.
Aunque la sonrisa volvió a la cara del entrenador del seleccionado nacional, tiene claro que hay que seguir trabajando. Los problemas pueden aparecer en cualquier momento y hay que saber cómo afrontarlos. "No podemos tomar esto como algo definitivo, pero muchas veces los partidos se desarrollan por distintas situaciones. Nosotros manejamos un plan para el juego, que hoy (martes) se interpretó muy bien en la elaboración de juego, pero es muy pronto para tomar una determinación, creo que los equipos deben saber manejar distintas situaciones", sentenció.
Pero el buen rendimiento del equipo de Pékerman se debe, en parte, a que volvió al sistema de juego que lo hizo brillar en Brasil. Sin buscarlo, el técnico encontró para este partido la fórmula adecuada para sumar tres puntos vitales. " Buscamos los jugadores que estaban mejor de acuerdo con el partido anterior. Sabíamos que podíamos generar un plan, que podíamos encontrar el buen fútbol y la profundidad. Pero cuando vi que teníamos la oportunidad de volver a ese módulo táctico no tuve dudas en utilizarlo, porque sabía que esta fórmula nos iba a dar buenos resultados", finalizó.
Por segunda vez en la era Pékerman, la selección colombiana de fútbol consiguió dos triunfos seguidos en una fecha doble de eliminatoria. Lo había hecho ante Uruguay y Chile, rumbo a Brasil 2014. Con estas seis unidades, la tricolor se mete en las posiciones de arriba y prácticamente recupera el terreno que había perdido en las primeras jornadas.
El siguiente reto para la selección nacional será la Copa América Centenario, la cual se iniciará el próximo 3 de junio en Santa Clara, California, en un duelo con Estados Unidos. En esa competición los otros rivales en el grupo A serán Paraguay y Costa Rica. En la eliminatoria al Mundial de Rusia 2018, los siguientes partidos en la próxima fecha doble del mes de septiembre serán con Venezuela en Barranquilla y Brasil en la ciudad de Fortaleza, justamente en el mismo escenario en el que los pentacampeones del mundo dejaron a Colombia por fuera del Mundial de Brasil 2014.