El partido ha tenido unos preparativos algo convulsivos, principalmente por la decisión de la FIFA de trasladarlo de Rabat a Marrakech, ya que el césped del estadio de la capital marroquí estaba en pésimas condiciones por las fuertes lluvias de los últimos días, que ya condicionaron mucho los cuartos de final.
El cambio de ciudad ha motivado unas modificaciones contrarreloj de los dispositivos de seguridad y de la logística preparados para este evento, especialmente teniendo en cuenta que el Real Madrid es el gran atractivo de esta edición y el equipo que arrastra multitudes de hinchas en el país.
El equipo blanco está decidido a conquistar el Mundial de Clubes, una de las pocas competiciones que faltan en su larguísimo y brillante palmarés, ya que sólo lo pudo disputar una vez, en el año 2000, y apenas quedó entonces en el cuarto lugar. Anteriormente, eso sí, el equipo había conseguido tres Copas Intercontinentales (1960, 1998, 2002), la competición que medía a los campeones de Europa y Sudamérica, y que otorgaba tradicionalmente la consideración de mejor equipo del mundo.
Pese a que el torneo tiene un prestigio habitualmente menor en Europa que en Sudamérica, el Real Madrid se ha fijado como objetivo conquistarlo y cerrar a lo grande un año 2014 en el que hizo historia conquistando su décima Copa de Europa.
“Sólo nos vale ganar, como en cualquier competición. Llegamos con un ambiente y un momento propicio al Mundialito”, dijo el entrenador de los españoles, el italiano Carlo Ancelotti.
El cuadro español está en uno de sus mejores momentos antes de este partido ante el Cruz Azul, frente al que buscará la 21ª victoria consecutiva. Las veinte anteriores le permiten ser líder en la Liga española y estar clasificado para los octavos de final de la Copa del Rey y la Liga de Campeones, donde hoy conoció que el Schalke 04 alemán será su rival. Un camino hasta ahora impecable que quiere continuar en el Mundial de Clubes, una competición que tres de sus integrantes, el entrenador Ancelotti y dos jugadores, Cristiano Ronaldo y Toni Kroos, ya ganaron con otros equipos en el pasado.
En el partido de estreno del Real Madrid no estarán ni el colombiano James Rodríguez ni el alemán Sami Khedira, recuperándose de sendos problemas físicos y que el italiano quiere recuperar para una eventual final ante el San Lorenzo argentino o el Auckland neozelandés.