:format(jpeg)/www.elespectador.comhttp://thumbor-prod-us-east-1.photo.aws.arc.pub/8EY2_feGOVeau7IO2sWAl-7gxU0=/arc-anglerfish-arc2-prod-elespectador/public/UE2243WG7RB7RK2RSB7QEXB2IU.jpg)
2016 ha sido el año de consolidación para William Tesillo. En enero pasó del Júnior de Barranquilla a Santa Fe, recientemente campeón de la Copa Sudamericana; en abril recibió de parte de José Pékerman la primera convocatoria a la selección colombiana de mayores para los partidos de eliminatoria frente a Bolivia y Ecuador, y ahora en agosto estuvo en la nómina de jugadores que participaron en los Juegos Olímpicos de Río después de 22 años de ausencia.
Este jueves, ante River Plate por el partido de ida de la Recopa Sudamericana, el defensor barranquillero volverá al once titular del equipo bogotano y será una vez más líder defensivo del cuadro rojo. Será el primer compromiso de Tesillo bajo las órdenes de Gustavo Costas, pero seguramente no será el último.
Tesillo nació en el barrio La Alboraya de Barranquilla, en una familia evangélica. Su papá es pastor cristiano y ha sido su guía para vivir pegado de Dios. De hecho, desde muy pequeño sus pasiones fueron el fútbol y Dios. A los siete años ya estaba en una escuela y jugaba en el equipo de su colegio, en el que actuaba de volante o delantero. Pero los años y los partidos pasaron y hoy es uno de lo mejores defensores centrales del fútbol colombiano. Quien lo guió en ese cambio de posición fue Agustín Garizábalo, hoy en día veedor del Deportivo Cali. “Como lateral tenía dificultades para centrar y correr, así que lo reubicamos, y como central terminaría sintiéndose más cómodo y marcando diferencia”, recuerda Garizábalo.
Pero en 2006 por poco acaba su sueño de ser futbolista. Viajó a Cartagena para jugar con el equipo Squash, y en un torneo llamado Las Américas, en Cali, pero luego de varios días de entrenamiento decidieron no contar con él. Alcanzó a avisarles a sus padres que preferiría el estudio, pero Garizábalo lo recomendó con Hernando Ángel, dueño de la Escuela Boca Júniors de Cali, para que siguiera su carrera. Entrenó, recuperó forma física y viajó a la capital del Valle del Cauca para vivir junto a 20 futbolistas en una casa pequeña.
En 2009, William debutó como profesional con el Centauros de Villavicencio, equipo de la B. Actuó 30 partidos y regresó a órdenes de Hernando Ángel, quien lo ubicó en su equipo, el Deportes Quindío. Allí estuvo cuatro temporadas, sumando 108 juegos. Creció mucho futbolísticamente y por eso pasó a cumplir el sueño de todo futbolista de la región Caribe: jugar en el Júnior de Barranquilla. Ganó la Copa Colombia en 2015 con el equipo tiburón ante el equipo del cual hoy hace parte.
Ahora, a sus 26 años, el atlanticense ha jugado 295 partidos oficiales y anotado siete goles en su carrera; en el cuadro cardenal ha disputado 29 juegos y ha marcado tres goles. Este jueves ante River, Tesillo podrá dar un paso importante en busca de su primer trofeo internacional. “Contra River es una buena oportunidad para seguir ganando y obteniendo reconocimientos. No será fácil, pero vamos con todo. Es un equipo grande del continente y lo respetamos, pero nosotros tenemos mucho fútbol y queremos ganar otro título” comentó el defensor.
El defensa vuele a las filas del equipo bogotano luego de su participación en los Juegos Olímpicos. “Feliz por estar de nuevo con el equipo. La experiencia en los Olímpicos fue muy bonita, pero ya tengo la mente en Santa Fe y en el partido ante River. Estoy a disposición del cuerpo técnico. Me dieron días de descanso y los aproveché. Ahora quiero jugar la Recopa Sudamericana”.
Junto a Javier López conformará la pareja de centrales que buscará detener a los delanteros millonarios Lucas Alario y Sebastián Driussi. Pero también trabajarán en el juego aéreo. Con Tesillo en el campo de juego, los aficionados rojos saben que él es un arma letal para convertir algún gol durante el compromiso, gracias a su potente cabezazo.
River llegó este miércoles a Bogotá
En un vuelo charter desde el aeropuerto Jorge Newberry, de la ciudad de Buenos Aires, llegó este miércoles en la noche el plantel argentino a la capital de la República, encabezado por su técnico Marcelo “El Muñeco” Gallardo.
El equipo millonario no realizó reconocimiento del terreno de juego. Iván Rossi, quien recientemente llegó al club como nuevo refuerzo, no viajó a Bogotá debido a una lesión en la pierna derecha, por lo que Ignacio Fernández será su reemplazante en el medio campo. La principal figura del cuadro de la banda cruzada es el volante Andrés D’Alessandro.