María Luisa Calle es la mejor ciclista en la historia de Colombia. Exitosa en ciclomontañismo, pista y ruta, esta antioqueña de 43 años ha conquistado para el país títulos y medallas en todo tipo de eventos internacionales, incluidos mundiales y Juegos Olímpicos.
De hecho, en Londres completará su cuarta Olimpiada. Estuvo en Sydney 2000, donde ocupó el puesto 12 en los 3.000 metros persecución individual. En Atenas 2004 se colgó la presea de bronce en la prueba por puntos y fue novena en la persecución. Y hace cuatro años, en Pekín, terminó empatada con la española Leire Olaberría en la tercera posición de la carrera por puntos, pero perdió la medalla porque la europea cruzó adelante en el último embalaje. Para ella, las justas en China tuvieron un sabor agridulce porque no alcanzó a subirse al podio, pero tuvo el honor de ser la abanderada colombiana en la ceremonia de inauguración de las justas.
“Para mí es un orgullo ir nuevamente a los Olímpicos. No es fácil mantenerse durante tanto tiempo entre la élite mundial, sobre todo en un deporte tan exigente físicamente”, señala María Luisa, múltiple campeona nacional, bolivariana, suramericana, centroamericana y panamericana.
Sin modestia, Calle explica que “todos esos resultados son la recompensa a muchos años de disciplina, trabajo y sacrificio. Sería muy frustrante no haber conseguido títulos después de haber dejado de lado muchas cosas. He recibido los frutos a tanto esfuerzo”.
En Londres, María Luisa participará en el omnium y en la contrarreloj individual, que será de 29 kilómetros. “En la primera, que es una prueba complicada, espero meterme entre las 10 primeras y para la crono estoy haciendo una preparación específica. Está un poco larga, porque generalmente las mujeres corremos 20 o 21 kilómetros, pero vamos a ver cómo nos va”, dice.
Para ella, sin embargo, más allá del objetivo deportivo, está la responsabilidad de ser ejemplo para todos los demás integrantes de la delegación nacional. “Muchos lo ven a uno como viejito, pero ojalá llegaran a los 43 años como he llegado yo, con ganas de seguir, energías para hacerlo y el nivel suficiente, que es lo más importante”.