Publicidad

“Nunca me fui”: Sebastián Saavedra, piloto colombiano de nuevo en las pistas

El Espectador conversó con el piloto bogotano sobre su regreso, el automovilismo colombiano y sus nuevos retos en el Lamborghini Super Trofeo de Nortemarica, en el que este fin de semana sumó un nuevo podio.

Daniel Bello
25 de junio de 2023 - 01:00 p. m.
Sebastián Saavedra, piloto colombiano que compite en el Lamborghini Súper Trofeo de Norteamérica.
Sebastián Saavedra, piloto colombiano que compite en el Lamborghini Súper Trofeo de Norteamérica.
Foto: Cortesía

El piloto colombiano Sebastián Saavedra fue parte de una generación de colombianos que en la década pasada dijeron presente en la Indycar, la élite de las Fórmulas en Estados Unidos. En 2019 se coronó vencedor de las míticas 24 Horas de Daytona, pero el año siguiente decidió tomarse una pausa, en parte, porque la pandemia y la crisis económica lo forzaron a eso.

Pese a no competir, el bogotano exploró nuevas facetas detrás de cámaras en el mundo del deporte a motor. Emprendió, hizo consultorías para equipos emergentes en Estados Unidos, desarrolló su propia marca de venta de partes y recientemente le surgió la oportunidad de correr en el Campeonato Lamborghini Super Trofeo Norteamérica.

Saavedra es compañero del piloto francés Nico Yamin en Ansa Motorsport, en la categoría PRO. Aunque el colombiano venía de correr en monoplazas (fórmulas) y prototipos, su desempeño en los Gran Turismos ha sido sobresaliente. En los circuitos de Laguna Seca (California) y Watkins Glen (Nueva York) se ha subido al podio y confía en pelear por la temporada.

¿Por qué tomo la decisión de dejar la Indycar en 2017?

Yo siempre analizo los pros y los contras. Después de siete años con la categoría y las oportunidades que estaban ahí presentes, vi que había unas mejores en carros deportivos y se abrió una oportunidad de trabajar como piloto de fábrica de una marca francesa.

¿Y por qué volvió a las pistas?

Siento que nunca me fui. Desde el 2018 estábamos armando unos proyectos diferentes por fuera de la Indycar, más que todo orientados a autos deportivos, carreras de duración como IMSA o ELMS y en 2019, cuando ganamos las 24 horas de Daytona, se abrió una oportunidad interesante de desarrollo en Europa, en esa época yo estaba corriendo con Pastor Maldonado y Roberto González.

Ya en 2020 tenía un programa de cuatro carreras en la Indycar. El plan era correr eventos selectos en vez de temporadas enteras pero llega el Covid y todo se frena. La economía en Colombia muere y pierdo el 100% de los patrocinadores de Latinoamérica. No fue que yo haya decidido retirarme o frenar, simplemente por concepto de COVID y economía quedé por fuera.

¿Qué estuvo haciendo en ese tiempo?

Desarrollé otros proyectos dentro y fuera de pistas, de ingeniería. Armé uno de Driver Coaching con varios atletas. Surgió más que todo por ayudar a equipos pequeños que me pidieron una consulta y se convirtió en un proyecto masivo. Abrí mi propia empresa de consultoría y ha sido algo chévere que no sabía que tenía en mí.

¿Cómo se dio su llegada a Lamborghini Super Trofeo?

Siendo desarrollador comencé a ayudar a otros equipos en varios aspectos, en especial en lo aerodinámico y la suspensión, fui subiendo hasta llegar a trabajar con Ferrari en un programa superchévere, el Ferrari Challenge. donde se presenta la oportunidad de trabajar con con Alain Nadal, el dueño del equipo Ansa Motorsports.

Llegué primero por el lado de desarrollo y de ingeniería. Después les comencé a introducir algunos pilotos. Hubo unos días de prueba por mi parte, los cuales fueron muy buenos, y el equipo se interesó en ver qué podíamos desarrollar en pista y también estaba el interés mío de convertirme en piloto oficial de la categoría y de la marca.

¿Cuáles fueron las sensaciones suyas al volver a ponerse el casco en de una manera competitiva?

Varias emociones. Todavía preparado para esto a nivel físico y mental porque no he parado mi preparación en ningún aspecto. siempre me he mantenido al 100% por si se abre una oportunidad en la Indycar, siempre he estado ahí, licenciado con ellos. Por lo tanto, hay que mantenerse. Obvio a uno se le viene a la cabeza que son carreras de duración a superaltas temperaturas y yo nunca había competido en Gran Turismos (GTs), siempre había estado en fórmulas o prototipos.

Todavía sigue ligado a la Indycar ¿En qué consiste eso?

Gabby Chávez y yo somos los únicos pilotos colombianos todavía licenciados por la Indycar para competir. Yo soy parte del equipo VIP de Activaciones de la Indycar, por lo que viajo a todas las carreras de la temporada e invito a todos los actores, cantantes y celebridades, les doy a conocer las pistas para que ellos tengan una buena experiencia con la categoría y hablen bien de ella.

También me mantengo activo en las oportunidades negativas, por ejemplo un piloto, lamentablemente se accidenta y se lastima una mano o algo así, ahí estoy para remplazarlo.

¿Qué destaca de la primera ronda, en Laguna Seca (California), dentro de una categoria nueva para usted?

En el corto tiempo que tuvimos estuvimos pegando stickers de patrocinadores en el carro y no pudimos caminar la pista. Pese a todo, una vez salimos a competir me sentí cómodo. Es lo que conozco y lo que sé hacer desde que tengo 6 años. Me sentí como si mi última carrera hubiera sido el día anterior.

Me tomó dos entrenamientos conocer qué tipo de límites tenía el carro. Fue un momento crítico, porque todos los pilotos profesionales de la categoría llevan años y yo no podía llegar con una mentalidad de reventarlos a todos. No me esperaba el podio en la primera carrera, más bien pensaba “comencemos con la evolución y programemos que el podio venga a la mitad la temporada”, pero conseguirlo en la primera competencia nos dejó muy emocionados. Fuimos del puesto 18 al tercero, pasando como berracos con muy buena estrategia y muy competitivos.

¿Cómo fue la adaptación a los GTs?

Me preguntaba “¿Como me voy a acoplar? ¿Cómo voy a entender este carro en muy corto tiempo?”. No tuvimos día de pruebas ni experiencia con los mecánicos. Me conocí con mi compañero de equipo un día antes de salir a pista. Hubo una necesidad de aprendizaje muy rápida, lo cual, pues da susto, porque la idea no es hacer el oso ni llegar biche a una oportunidad como esta, teniendo en cuenta que el objetivo principal es que la marca esté pendiente de uno, pero a la larga creo que la reventamos.

¿Despues de ese primer podio cuáles son las sensaciones?¿Ahora planean meterse de lleno en la pelea por el título de temporada?

Total, siendo nuestro primer contacto con el equipo, el carro, la categoría y los contrincantes, es toda una nueva lista de tareas con las que nos tuvimos que acoplar. Ya sabemos qué es lo que tenemos a nivel de equipo, de mecánicos e ingeniería de pilotos. Sabemos qué tenemos que hacer para mejorar, que es lo importante.

¿Cómo describiría el cambio de manejar prototipos y formulas a hacerlo en Gran Turismos?

El GT es pesado, no frena ni cerca a lo de un fórmula por el aspecto aerodinámico. Me interesó bastante lo difícil que fue manejarlo porque no es un carro al que le guste ser conducido de manera leve. Hay que ser agresivo a comparación de un Ferrari Challenge, que es relativamente fácil de manejar, con poca potencia y más liviano. Es una bestia y hay que obligarla a hacer cosas que como piloto uno no se siente confortable en ningún momento. Hay que estar muy incómodo para que el carro ande bien.

¿Diría que ganar las 24 Horas de Daytona en 2019 fue la victoria más importante de su carrera?

Sin duda es el momento más crítico a nivel profesional. Hay victorias que también fueron muy importantes para mí como la primera en la Indy Lights o la pole position en Indycar. Son momentos que los pongo muy cerca al de la carrera de las 24 horas. Haber ganado me dejó supremamente honrado, por tanto, por la vida y haber representado a Colombia. Juan Pablo [Montoya] y yo hemos estado ahí y es algo que sin duda nos mantendrá muy contentos por mucho tiempo.

¿Cómo se dio ese acercamiento a Pastor Maldonado -piloto venezolano que compitió en Fórmula 1- con quien hizo equipo para hacer equipo y ganar las 24 Horas de Daytona?

Como en 2018 competí con el mexicano Roberto González quedamos a la expectativa de seguir haciendo algo juntos porque tuvimos una parcería muy fuerte y una hambre de ganar muy parecida. Al final de ese año se me presenta la oportunidad en enero de hacer unas pruebas en las que me fue súper bien. Éramos varios pilotos que estamos en proceso de prueba y yo me quedé con el asiento. Fue un oportunidad única. Roberto tenía una parecería con Pastor de muchos años e hicimos un equipo con concepto latino. Fue un año muy especial, carrera difícil, lluvia y demás, pero muy chévere.

A lo largo de la entrevista mencionó en un par de ocasiones a Gustavo Yacamán ¿Cómo es la relaión de ustedes?

Somos muy buenos parceros. Si yo voy a Miami, me quedo en su casa y cuando él viene aquía Indianpaólis se queda en la mía. Nuestra primer carrera fue en Barranquilla en 1998, en el Campeonato Nacional de Karts. Teníamos 6 o 7 años. Ambos tenemos una foto muy buena de ese momento.

¿Qué opina de los de los colombianos que ahorita estaban en categorías como Fórmula 3 y Fórmula 4? Todos ellos sueñan con llegar a la élite.

Si antes estaba el tema difícil, ahora es el triple, es un mundo de muchas categorías y yo le veo mucho negativo a eso. Hay un mundo muy político que se está comiendo el deporte a motor lamentablemente y es de dónde uno es. Si uno es francés, entonces poder trabajar con Peugeot, por ejemplo. La dificultad de posicionarse al ser de un país que tiene una pequeña representación en el automovilismo. Espero que la empresa privada colombiana y el Gobierno colombiano se den cuenta de ese beneficio tan lindo que es el deporte y los embajadores de buena fe son algo muy necesario.

¿Qué quiere decir por embajador de buena fe?

Representar un país con un historial negativo no ha sido lo más fácil y hoy en día, que ya por fin estamos cambiando esa imagen y trayendo un nombre diferente por las victorias que hemos tenido no solo en automovilismo, sino en ciclismo fútbol y tenis. Ser embajadores de buena fe, es dejar el nombre en Colombia el exterior, en lo más alto del podio, haciendo lo que nos apasiona: el deporte

Usted perteneció a una generación de varios pilotos colombianos que dijeron presente en la IndyCar y en la actualidad la mayoría de ellos están alejados de las pistas ¿Cuál considera el principal factor de eso?

Fue una época muy bacana y una camada súper fuerte que no veo que en unos años se vuelva a repetir, lamentablemente. El principal factor es 100% económico. Aun así, teniendo apoyos fuertes de privados y fuertes de gobierno además llega un punto en que pilotos como Carlos Muñoz, que estuvo tanto tiempo con un gran equipo, se vuelve imposible hacer que se convierta en una carrera de vida.

Como él, todos nosotros, como también pasó con Gustavo Yacamán, vimos que estábamos haciendo más dinero fuera de competencias que dentro de ellas y esa fue la última gota que rebasó el vaso,. Vimos que después de tantos años de desarrollo de competencias el retorno no era lo mismo fue un momento triste porque mi mente 1 quiere vivir de su pasión y mi pasión es definitivamente, las competencias.

¿Qué falta en su opinión para que el automovilismo colombiano crezca?

Si no hay televisión no hay nada. En la época de Montoya, como era el bicho nuevo se generó un boom, pero luego se apagó. El Automovilismo si no es el deporte más caro es del top 3, y si la gente no le pone atención a ver una categoría por televisión en Colombia yo creo que hay que hacer algo alrededor de eso, porque si la categoría no la pueden vender y no pueden beneficiarse de manera económica, con vender patrocinadores y vender espacios.

¿Hay algún otro ptroyecto en el que usted esté metido este año?

He venido trabajando en como emprendedor para armar una empresa en Colombia de venta de autopartes. Es prácticamente logística de Asia, Estados Unidos y Europa y traerlas al país. Me dio por cambiar a nivel cultural eso de que solo se puede comprar partes en el 7 de agosto y los concesionarios, que ponen unos precios absurdos por partes que no son caras. Eso es lo que estoy intentando hacer ahorita con riparo.com.co, que estará saliendo al aire dentro de muy poco.

🚴🏻⚽🏀 ¿Lo último en deportes?: Todo lo que debe saber del deporte mundial está en El Espectador

Daniel Bello

Por Daniel Bello

Periodista de la Pontificia Universidad Javeriana. Fue practicante de Pacifista entre 2020 y 2021. Desde el 2019 escribe sobre fútbol, política e historia en El Espectador. Tiene experiencia cubriendo paz, mundo y medio ambiente.@daniel_eudosiodbello@elespectador.com

Temas recomendados:

 

Sin comentarios aún. Suscribete e inicia la conversación
Este portal es propiedad de Comunican S.A. y utiliza cookies. Si continúas navegando, consideramos que aceptas su uso, de acuerdo con esta política.
Aceptar