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El Centro Nacional Antidopaje de Ucrania (NADTS) ha pedido al Comité Olímpico Internacional (COI) que prohíba la participación de Rusia en los Juegos Olímpicos de Invierno de 2018 en PyeongChang (Corea del Sur) debido a los casos de corrupción y dopaje en el deporte ruso.
Ucrania se unió recientemente a las demandas del Instituto de Organizaciones Nacionales AntiDopaje (iNADO) que, con el apoyo de una decena de países, llamó al COI a excluir a la Federación Rusa de los Juegos que se celebrarán en febrero en Corea y "llevarla ante la justicia".
"Condenamos enérgicamente las violaciones de las normas internacionales antidopaje, los principios de juego limpio y las reglas morales y éticas del deporte que han tenido lugar a nivel estatal por parte de Rusia, particularmente en los Juegos Olímpicos de Sochi", reza el comunicado del NADTS.
El pasado 14 de septiembre diecisiete líderes de organizaciones nacionales antidopaje se reunieron en Denver (EE.UU.) para exigir que el gobierno ruso asuma responsabilidad pública por las "acciones fraudulentas" descritas en el informe McLaren de la Agencia Mundial Antidopaje (AMA).
"La falta de investigación y castigo apropiados para quienes violaron las normas antidopaje ignora la credibilidad de millones de atletas limpios en todo el mundo", denunció el iNADO.
No obstante, Ucrania se muestra partidaria de que deportistas rusos compitan en los Juegos de 2018 de forma individual e independiente, siempre y cuando se sometan a las pruebas antidopaje establecidas por la Asociación Internacional de Federaciones de Atletismo.
Según el informe McLaren publicado en 2016, un millar de deportistas rusos estuvieron implicados en prácticas de dopaje en los Juegos de Londres 2012 y Sochi 2014, durante los cuales se organizó un sistema para encubrir los positivos.