Cuando faltan ocho jornadas para el final, no hay nada muy definido en el Calcio italiano.
Milan, el líder del torneo con 64 puntos, cedió un empate el sábado frente al Catania. De esta forma, el equipo de Massimiliano Allegri, que había abierto la cuenta por intermedio del brasileño Robinho, vio reducida su ventaja ante su más inmediato perseguidor, la Juventus.
Aprovechando muy bien el tropiezo de los rossoneri, el cuadro del exjugador Antonio Conte venció 3-0 al Nápoles, cuarto del torneo, con anotaciones de Leonardo Bonucci, el chileno Arturo Vidal y de Fabio Quagliarella, que no lo celebró debido a su pasado napolitano. En el encuentro fue expulsado con roja directa el lateral colombiano Camilo Zúñiga, tras agredir con un codazo a uno de sus contrarios.
Volvió al triunfo el Inter de Milán, que marcha octavo en la tabla de posiciones. Y lo hizo en un emocionante partido en el que le ganó 5-4 al Génova.
Todos los goles interistas fueron argentinos, con una tripleta de Diego Milito (a los 13’, 27’ y 85’ de penal), un tanto del defensor Walter Samuel (38’ del primer tiempo) y otro más de Mauro Zárate (a los 74’).
Hay que destacar que el colombiano Freddy Guarín debutó con el cuadro que dirige Andrea Stramaccioni, que se estrenó en el cargo con esta importante victoria.
Y Guarín no decepcionó. Desde que entrara a los 15 minutos del segundo tiempo, reemplazando al serbio Dejan Stankovic, el de Puerto Boyacá fue inquietante, asociativo y solidario. A él le hicieron la falta que derivó en el penal que el argentino Milito convirtió en gol.
En otros partidos de la fecha, el Udinese siguió complicándose en su objetivo de jugar la próxima Liga de Campeones, tras perder con el Siena por 1-0. La Roma, que es sexta, goleó al modesto Novara por 5-2. En la zona baja de la tabla, la Fiorentina, que marcha decimoséptima, continúa disparando todas las alarmas, sobre todo luego de caer 2-1 en casa con el ChievoVerona, que marcha décimo en la clasificación.