La Copa Davis, bajo alerta

Gran Bretaña retrasa un día su viaje a Gante, pero la Federación Internacional no aplaza la final de esta semana contra Bélgica (del 27 al 29) y se adoptarán medidas especiales.

Alejandro Ciriza, El País
25 de noviembre de 2015 - 11:05 a. m.
La dupla Jamie Murray-Dominic Inglot entrenan previo al duelo por la final de la Copa Davis. Foto: AFP
La dupla Jamie Murray-Dominic Inglot entrenan previo al duelo por la final de la Copa Davis. Foto: AFP

De los días 27 a 29, es decir, del viernes al domingo, Bélgica y Gran Bretaña se medirán en Gante por el título de la Copa Davis. La primera disputará la final 111 años después —la última y única que disputó fue en 1904—, mientras que la segunda ansía su décima Ensaladera, cetro que no obtiene desde 1936 y por el que no lucha desde 1978. El duelo, inesperado en el ámbito tenístico por la flaqueza histórica del equipo belga y la discreta competitividad del británico en las últimas décadas, tendrá lugar en medio de un marco muy convulso. Alertada por la amenaza terrorista, Bélgica ha multiplicado la seguridad en todo el país y la final de la Davis no escapa tampoco a los dispositivos especiales.

El pulso tendrá lugar en el Flanders Expo, a unos 55 kilómetros de Bruselas y con capacidad para 13.000 espectadores. Ahora mismo, Gante, foco turístico con una población de unos 250.000 habitantes, se encuentra en el nivel tres de alerta terrorista, el segundo más elevado, tan solo uno por debajo de la capital belga, Bruselas. Sin embargo, la celebración de la final de la Copa Davis sigue adelante.

Así lo confirmó la Federación Internacional de Tenis (ITF). “Estamos dando todos los pasos necesarios para garantizar la seguridad de los equipos, los espectadores, los medios y todo el personal de trabajo”, aseguró el organismo a través de un comunicado. En la nota, la ITF subrayó que se adoptarán medidas adicionales y aseguró que están “supervisando de cerca la situación de Bélgica y específicamente la de Gante”, donde se espera la llegada de alrededor de 1.000 seguidores británicos.

En un principio, Gran Bretaña tenía la intención de volar a la ciudad belga el domingo, pero finalmente se ejercitó en las pistas de Queen’s (Londres) y postergó su aterrizaje en la sede de la final hasta ayer a mediodía. Lo hizo en un vuelo privado, sin concretar la hora ni el punto de partida, como medidas preventivas. Por la tarde, el capitán Leon Smith y sus cinco hombres, Andy Murray, su hermano Jamie, Kylie Edmund, Dominic Inglot y James Ward tomaron ya contacto con la arena del recinto.

“Tenemos que seguir con nuestras vidas. Debemos salir ahí fuera y seguir haciendo lo mismo que todos los días; de lo contrario, los terroristas nos estarían ganando”, exponía hace unos días Murray, número dos del mundo, mientras disputaba aún la Copa de Maestros.

“Somos conscientes de que Bélgica ha elevado el nivel de alerta terrorista en Bruselas. Esto nos preocupa mucho, pero continuaremos con los preparativos”, expresó ayer a la BBC el presidente de la ITF, David Haggerty. “La final se disputará”, agregó el dirigente de la Federación Flamenca de Tenis (FTF), Gijs Kooken, a la misma emisora; “no hemos recibido una señal de que no sea seguro organizar el evento. Es una cita de exposición internacional, con 13.000 personas cada día; hay riego en la actual situación, por supuesto, pero confío mucho en nuestro gobierno”.

Todos los movimientos del equipo británico a lo largo de la semana se harán bajo estrictas medidas de seguridad. El tenis y la Copa Davis también están en alerta.

Por Alejandro Ciriza, El País

Temas recomendados:

 

Sin comentarios aún. Suscribete e inicia la conversación
Este portal es propiedad de Comunican S.A. y utiliza cookies. Si continúas navegando, consideramos que aceptas su uso, de acuerdo con esta política.
Aceptar