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Sin lugar a dudas, 2014 será recordado por los colombianos como un año lleno de logros deportivos. El ciclismo, el fútbol, el automovilismo y el atletismo se han llevado toda la atención; sin embargo, el tenis, tan criticado por muchos en el último tiempo, también nos ha brindado grandes alegrías.
Alejandro Falla, Alejandro González, Juan Sebastián Cabal, Robert Farah y Santiago Giraldo, entre otros, han sido protagonistas durante esta temporada. Gonzo se afianzó y se metió en el top 100, Falla se coronó en Calcedonia, Cabal y Farah lograron su primer título ATP en el Abierto de Río de Janeiro y Giraldo, quien ha tenido que luchar contra la corriente luego de una apendicitis que padeció hace dos años, está pasando por su mejor momento desde que se hizo profesional en 2004.
Este pereirano de 26 años de edad consiguió ayer algo histórico para el país: se ubicó en el puesto 30 del ranquin ATP, algo que venía buscando desde hace rato. Siempre que Giraldo concedía alguna entrevista mencionaba esta meta personal. “Uno puede decidir jugar mejor y estar preparado en todas las cosas, pero sin dudas el objetivo mínimo para mí es el top 30”, le decía hace unos meses a El Espectador, y ahora que lo consiguió deberá seguir por este camino que ha venido labrando desde que se metió oficialmente en el top 100, por allá en enero de 2011.
Para muchos seguramente será un día más, pero para Giraldo es un sueño cumplido. No es fácil ser profesional de este deporte y mucho más en Colombia. El talento es un regalo, pero más allá de que exista o no hay cosas más importantes. La constancia, la mentalidad, las ganas y el trabajo en equipo han hecho que el colombiano tenga una temporada inolvidable.
Bajo la dirección técnica de Felipe Berón y del chileno Fernando González, quien fue número 5 del mundo, medallista de oro en dobles de los Olímpicos de Atenas 2004 y medallista de plata de los Juegos Olímpicos de Pekín 2008, ha logrado mantener una regularidad en su juego: “He mejorado mucho en mis falencias, como el segundo saque, el slice y la volea, pero la idea es que sean mejores. Al igual que la capacidad mental”, comenta.
El Conde de Godó fue el escenario elegido para que Santiago Giraldo diese al paso al frente que necesitaba después de ver frenada su progresión como consecuencia de la peritonitis hace dos años. Tras alcanzar la final en el torneo de Barcelona, el colombiano logró acceder a los cuartos de final del Masters 1.000 de Madrid, del ATP 250 de Stuttgart y la semana pasada en el ATP 500 de Washington. Ahora, en Toronto, Canadá, ante el australiano Nick Kyorgios, buscará seguir por la senda del triunfo.
“Los resultados que estoy mostrando se deben a un fuerte trabajo de pretemporada que realizó todo el equipo Colsánitas. Ahora estoy cometiendo menos errores. Claro, me exijo y siempre voy a querer ser aún más constante, pero hoy me encuentro con mucha confianza”, dijo Giraldo.
El pereirano se ha consolidado como uno de los mejores tenistas de todos los tiempos, y ahora en Canadá se prepara para disputar el US Open y la Copa Davis con el equipo nacional.
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@manu2385