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El petróleo subió hasta cerca del tope de su rango de negociación reciente después de que un aumento menor de lo esperado en las reservas de crudo de Estados Unidos se sumó a las señales de un mercado físico ajustado.
West Texas Intermediate terminó la sesión por encima de los 78 dólares el barril después de que un informe del gobierno dijera que los inventarios de crudo estadounidenses aumentaron en 3,51 millones de barriles, menos de lo que muchos observadores del mercado esperaban. Las tasas de funcionamiento en las refinerías finalmente pusieron fin a una racha de caídas para este año y pueden aumentar en las próximas semanas a medida que las instalaciones se reinicien después de una serie de interrupciones y mantenimiento, impulsando la demanda de crudo.
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Los diferenciales de tiempo indican un mercado más sólido, y los indicadores de los saldos de oferta de crudo en el punto de entrega de futuros estadounidenses en Cushing, Oklahoma, también se han disparado. Ambas medidas siguen un patrón alcista que indica una escasez de oferta a corto plazo.
“Las cifras no cambiaron las reglas del juego para la narrativa más amplia, pero mostraron signos de brotes verdes y pueden calmar algunos temores de un colapso de la demanda”, dijo Rebecca Babin, operadora senior de energía de CIBC Private Wealth.
El crudo se cotiza cerca del extremo superior del rango de este año, mientras los inversores sopesan una perspectiva de demanda moderada para el principal importador, China, frente a los crecientes riesgos geopolíticos en el Medio Oriente y las perturbaciones en el Mar Rojo. En Libia, las milicias que han dominado la capital durante años comenzarán a retirarse en abril, y los operadores están monitoreando cómo eso podría afectar los flujos de petróleo que salen de la nación de la OPEP.
En Estados Unidos, las minutas de la última reunión de la Reserva Federal mostraron que la mayoría de los funcionarios siguen preocupados por el riesgo de reducir los costos de endeudamiento demasiado pronto, lo que podría mantener un obstáculo para la demanda de energía.
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Otros datos también ayudaron a prestar apoyo a los mercados. La demanda promedio de cuatro semanas de combustible para aviones en Estados Unidos está cerca del nivel estacional más alto desde antes de la pandemia.