Venezuela recibe ayuda de dos petroleras europeas ante escasez de combustible

Los consumidores han tenido que hacer cola hasta por dos dias para conseguir gasolina. Photographer: Gaby Oraa/Bloomberg

Foto: Bloomberg - Gaby Oraa

El presidente Nicolás Maduro recibió un primer impulso de las grandes petroleras Eni Spa y Repsol SA con un cargamento de TLCAN para ayudar a aplacar la escasez de combustible que ha mantenido a los venezolanos haciendo fila durante días en las estaciones de servicio.

La petrolera estatal Petróleos de Venezuela SA recibió un cargamento de 260.000 barriles de TLCAN enviados por la italiana Eni y la española Repsol, según tres personas familiarizadas con la situación. La nafta se mezclará con gasolina menos refinada producida en el centro de refinación de Paraguaná para ayudar a aliviar la escasez de conductores venezolanos, dijo una de las personas.

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No están claros los términos del intercambio, pero las empresas europeas y PDVSA están en conversaciones para un cronograma de suministro de combustible, dijo una de las personas. Eni se negó a comentar sobre los detalles de la transacción “ya que son sensibles desde un punto de vista comercial”, además dijo que todas sus actividades en Venezuela cumplen con las disposiciones sobre sanciones. Repsol y PDVSA no respondieron de inmediato a una solicitud de comentarios.

Esta es la primera vez que las grandes empresas europeas envían el TLCAN a Venezuela desde que EE.UU. impuso sanciones a PDVSA en 2019. Antes de eso, Venezuela solía suministrar regularmente petróleo crudo a cambio de gasolina, diésel y diluyentes, de empresas como Repsol, Reliance y una subsidiaria de Rosneft.

Eni y Repsol comenzaron a exportar petróleo venezolano el año pasado después de recibir un acuerdo en una carta de compatibilidad del Departamento del Tesoro estadounidense.

El buque Minerva Xanthe llegó el 29 de agosto procedente del puerto de Milazzo de Eni, según datos recopilados por Bloomberg.

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La producción actual de combustible de Venezuela ronda los 95.000 barriles por día, lo que resulta insuficiente para satisfacer la demanda. La mayor parte del suministro de su sistema de refinación se dirige a la capital, Caracas, para evitar interrupciones. Otras ciudades del país han soportado durante mucho tiempo el racionamiento, con muchas estaciones de servicio cerradas o funcionando solo unas pocas horas al día.