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Independientemente de los problemas de sobrecostos en que se ha visto envuelta la Refinería de Cartagena (Reficar), hoy es una realidad que comienza a generar utilidades y dar impulso a la industria colombiana.Las nuevas exigencias ambientales por el calentamiento global le abren nuevas oportunidades de negocios a Reficar, que ha logrado alcanzar las metas de refinación de 150.000 barriles, que es la máxima capacidad de producción, para consolidarse como una de las más modernas plantas de este tipo en Latinoamérica.
La nueva regulación internacional, denominada Marpol, que obliga a reducir considerablemente el contenido de azufre en los combustibles para los barcos del mundo, es la gran apuesta de negocios para Reficar. Esas exigencias pasarán de 3,5 % a 0,5 % de contenido de azufre a partir del primero de enero de 2020. Amaury de la Espriella, presidente de Reficar, considera que la planta representa progreso. “Es una refinería que le está representando a Colombia un crecimiento importante en su Producto Interno Bruto. Además, le aporta el combustible que requiere la Costa Atlántica y hacia el futuro va a suministrar la gasolina y el acpm que requiere el interior del país”, aseguró.
De la Espriella señaló que el programa Marpol significa que los buques del mundo tienen que cambiar el combustible con el que se movilizan. Actualmente usan fuel oil y deben pasar a combustibles más limpios, especialmente el diésel de ultrabajo azufre. Hacia la producción de ese tipo de combustible dirige su accionar Reficar.
Esto hace que se valoricen las refinerías que producen el diésel de ultrabajo azufre, como la de Cartagena, que está en capacidad de producir inclusive diésel con 10 partes por millón de azufre, señala Ecopetrol. La producción de Reficar es una gasolina de muy alto octanaje y muy bajo azufre, lo mismo que el diésel.
Muchas refinerías del mundo de baja o mediana conversión no cumplen con esa calidad, que se exigirá a partir de 2020, reafirma la empresa petrolera colombiana. “Esto cambia de forma favorable las perspectivas financieras de la refinería de Cartagena, la más moderna de América Latina”, sostiene un vocero de Ecopetrol.
El presidente de Reficar manifestó que la empresa lleva dos meses con resultados positivos, una cifra cercana a los US$16 millones, en el primer bimestre de 2017. Eso significa que su operación ya empezó a generar caja y es capaz de entregar un resultado operativo positivo. De la Espriella insistió en que el consumo internacional de combustibles de bajo azufre, más limpios, les abre las puertas a mejores ingresos para Reficar.
Esta refinería está en capacidad de producirlo. Entonces eso va a ser muy importante, porque va a permitir que los márgenes se mejoren y pueda pagarse (la refinería) en un menor tiempo a lo contemplado”. Sin embargo, eso va a depender de las condiciones internacionales, anotó.
El presidente de Reficar señaló que la recuperación de la inversión se puede presentar entre ocho o diez años, dependiendo de comportamiento del mercado del precios internacionales de los hidrocarburos. “Nuestra expectativa es que en el mediano plazo esta refinería esté produciendo un Ebitda cercano a los 600 millones de dólares”, explicó.
Reficar es considerada como una de las más eficientes del mundo, del crudo con que se carga le extrae el 97 % de valor. De la Espriella no descartó que hacia el futuro se contraten nuevas inversiones para alcanzar el máximo de los resultados. En los dos primeros meses de este año, Reficar vendió cerca de US$400 millones. El presidente de Reficar insistió en que la planta ya está en su etapa final de estabilización. En este momento está con una carga entre 140 mil y 150 mil barriles por día, lo que significa plena capacidad, dijo.