Un talento que se ignora

Las mujeres cuentan con altos niveles educativos, pero no alcanzan posiciones en la alta gerencia. Las principales razones: estereotipos y falta de empoderamiento.

MARÍA ALEJANDRA MORENO TINJACÁ
25 de abril de 2017 - 08:48 p. m.
Un talento que se ignora

En el mundo, según el informe del 2015 del Global Gap Index (GGI) del World Economic Forum, hay 1.750 millones de mujeres en la fuerza laboral. Un avance significativo que se logró gracias al acceso a la educación primaria y secundaria. A pesar de los avances, se evidencia que las mujeres compiten en desigualdad de condiciones y esto se ve reflejado en brechas salariales. Esto significa que las mujeres trabajan el doble que los hombres y ganan un 23 % menos en todo el mundo. Incluso en países como Alemania, donde las políticas son cada vez más favorables.

A nivel global, persisten amplias brechas en el liderazgo de las mujeres. Según un estudio de ONU Mujeres, al ritmo del progreso actual, se necesitarán 81 años para lograr la paridad de género, más de 75 años para alcanzar igual remuneración entre hombres y mujeres por el mismo trabajo y más de 30 años para lograr el equilibrio en los puestos de toma de decisión. En general, las mujeres se enfrentan a barreras como responsabilidades familiares, falta de experiencia en el ámbito empresarial y su poco conocimiento en los negocios.

En Colombia la situación sigue las tendencias globales. En América Latina, aparte de Colombia, solamente Venezuela y Costa Rica presentan tasas de desempleo femenino superiores al 10 %. Durante 2016 el comportamiento del mercado laboral demostró que las mujeres tienen tasas de participación menores que los hombres (54,5 % frente a 74,9 %, respectivamente) y tasas de desempleo mayores (12 % frente 7,1 %, respectivamente), según datos del DANE, GEIH 2016.

Todo lo anterior nos muestra que las brechas siguen siendo considerables y que debemos tomar medidas aceleradas para avanzar hacia la igualdad. Belén Sanz Luque, representante de ONU Mujeres Colombia, habló para El Espectador acerca de los retos y oportunidades frente al tema.

¿Cuáles son las principales barreras que se encuentran las mujeres para liderar?

Las barreras que enfrentan las mujeres para su empoderamiento son muy sutiles, pero significativas. Básicamente se refieren a barreras de acceso a escenarios de poder en los que no tienen igualdad de condiciones para competir y a los estereotipos y dinámicas culturales que suelen ponerlas en desventaja, con sobrecargas (hogar) o con el encasillamiento en ciertos ámbitos (carreras que se creen son exclusivamente femeninas).

¿Cómo se puede cerrar la brecha de los salarios?

Para ello se hace necesario valorar adecuadamente las ocupaciones en las que las mujeres tienen una presencia predominante, como las relacionadas con el cuidado, de modo que los niveles retributivos sean acordes a las aptitudes de estas trabajadoras y a la contribución que realizan con su labor al buen funcionamiento de la economía y la sociedad. Es fundamental establecer medidas de igual pago a igual cargo y formación en todos los ámbitos económicos.

Reconocer el trabajo no remunerado y redistribuirlo.

El cuidado del hogar y de los miembros de la familia ha sido realizado típicamente por las mujeres y es necesario redistribuir estas tareas de forma equitativa entre hombres y mujeres. Una propuesta es fortalecer los servicios sociales básicos, como la educación y la salud, que complementan las labores de cuidados no remuneradas y constituyen un nicho de empleo muy importante para las mujeres. El Estado podría apoyar a los cuidadores y cuidadoras que no perciben remuneración por este trabajo, asegurando que participen en la formulación de políticas.

¿Por qué es importante eliminar las brechas en el liderazgo y toma de decisiones?

Primero es una cuestión de derechos humanos y de representatividad de las mujeres, más de la mitad de la población colombiana. Contar con los aportes de las mujeres como líderes políticas o económicas supone beneficios para el conjunto de la sociedad. Las mujeres son el 55 % de quienes se gradúan en educación superior en el país, están ampliamente capacitadas para aportar su conocimiento y experiencia al país desde puestos de liderazgo.

¿Económicamente cómo puede impactar?

En términos económicos incluso se puede cuantificar como ganancia. El informe global “El progreso de las mujeres en el mundo (2015-2016), Transformar las economías para realizar los derechos”, de ONU Mujeres (2015), estima que “al superar las brechas de género en el mercado laboral se podría aumentar el PIB per cepita en la región (América Latina) en 14 %”.

¿Cómo disminuir esas barreras en Colombia?

Para lograr una Colombia 50-50 en el 2030 es necesario avanzar en medidas como promover mayor incorporación de las mujeres al mercado laboral y a espacios de toma de decisiones. En ese sentido, es urgente promover la eliminación de los estereotipos de género, teniendo en cuenta la formulación y aplicación de estrategias que aseguren el acceso universal de las mujeres a la educación integral, promoviendo las áreas de ciencias y tecnologías de información, así como política o economía entre las mujeres, para promover su empoderamiento económico y político y eliminar la segregación sexual en el mundo del trabajo.

Por MARÍA ALEJANDRA MORENO TINJACÁ

Temas recomendados:

 

Sin comentarios aún. Suscribete e inicia la conversación
Este portal es propiedad de Comunican S.A. y utiliza cookies. Si continúas navegando, consideramos que aceptas su uso, de acuerdo con esta política.
Aceptar