Carlos Gaviria, el director, estrena este viernes en Colombia su película ‘Retratos en un mar de mentiras', luego del paso por los festivales de Berlín y Cartagena; en este último ganó el premio a mejor ópera prima.
La cinta se centra en un momento de la vida de Marina, una joven atormentada por una situación violenta que mató a su familia. El personaje es interpretado por Paola Baldión, una joven actriz colombiana que reside en Nueva York desde el 2002, en donde se prepara en cine y teatro, estudios que comenzaron en Colombia de la mano del actor Edgardo Román y Paco Barrero.
Mientras estudiaba en el colegio italiano de Bogotá, Baldión trabajó en la telenovela del canal RCN ‘Amor a mil'; y desde entonces ha estado alejada de la pantalla chica, y asegura que no quiere volver a ella.
"Quiero dedicarme al cine", confiesa. "Quiero hacer acción y comedias pero no terror". En Estados Unidos ha participado en pequeños proyectos y ‘Retratos en un mar de mentiras' es la primera película nacional en la que ha estado.
Bladión define a Marina como una "antiheroína", pues no tiene "ilusiones en la vida". "Ella no es la típica protagonista, no es perfecta, al contrario, es muy humana. Marina tiene un trauma de postguerra que le impide pensar en un futuro", dice la actriz.
Quien salva el aburridor día a día de Marina es Jairo, su primo (Julián Román), quien se gana la vida como fotógrafo haciendo retratos en un mar de mentiras. Él la invita a realizar un viaje en su Renault 4 a la costa y en ese trance ella empieza a ver a su primo como su primer amor.
"A medida que comparten Marina va dejando su trauma en el pasado, él le enseña cosas básicas, como mirar a los ojos", explica Blandión, quien para interpretar a su personaje duró varios días sin lavarse el pelo y no usó maquillaje.
También, junto a Román y Gaviria estuvo investigando sobre los traumas que deja la guerra en las personas. Y aunque a primera vista ‘Retratos en un mar de mentiras' es una historia que trata sobre el conflicto armado, su director asegura que más bien es un filme que la gran diferencia con las otras películas que se han producido en el país radica en que la protagonista es una víctima de la guerra y no una victimaria.
Serán los espectadores quienes den la última palabra sobre la película que se estrena este viernes en las salas de cine colombianas, luego de haber participado en la sección ‘Generation' del Festival de Cine de Berlín 2010; así como en la edición número 50 del Festival de Cine de Cartagena, en donde se llevó el premio a mejor ópera prima.