Las desventajas del estrés laboral son llevadas al séptimo arte

Charlotte Gainsburg es Alice en la película Samba. / Cortesía

 Charlotte Gainsburg es Alice, una ejecutiva que sufre del síndrome de burnout, ocasionado por el estrés laboral. En proceso de recuperación es obligada a realizar trabajos sociales en una ONG tras perder los nervios y agredir a un compañero, pero su verdadera misión será ayudar a Samba, un inmigrante que ha sufrido en mundo desconocido.

Gainsburg en entrevista con El Espectador revela cómo llegó a la película y cómo se preparó para su papel.

Háblenos de sus primeros encuentros con Eric Toledano y Olivier Nakache.

Me sentí atraída por su método inusual de trabajo. Eric y Olivier tuvieron la amabilidad de asociarme a sus reflexiones desde el principio. Me sentí muy afortunada de ser parte del proyecto completo.

¿Trabajar desde el origen del proyecto cambia la forma de preparar un papel?

Sí. Tenemos más tiempo para pensar en ello. Inconscientemente, el personaje encuentra su camino. Entonces concretamente el trabajo sigue siendo el mismo. He leído algunos libros sobre el burn-out, conocí a un médico y también fui a un hospital para empaparme del ambiente en el que ella se movía.

Cuéntenos acerca de esa escena donde ella pierde la compostura, cuando al regresar del centro de detención, Samba se rebela después de que ella le dice que no puede presentar su solicitud de regularización antes de un año.

Fue muy emocionante e inusual para mí que suelo entender con un pequeño hilo de voz. Es difícil querer hacer reír, tener que desnudarte y a la vez atreverse al exceso. Luché con mi naturaleza. Eric y Olivier me ayudaron mucho a relajarme y filmar esas escenas fue muy placentero.

Esta es la primera vez que actúa junto a Omar Sy. ¿Cómo fue trabajar con él?

Es un actor que me encanta, un compañero maravilloso. Omar entró en la piel de Samba y no salió de ella jamás. Se podía sentir que él depositaba toda su confianza en Eric y Olivier. Ellos actuaron como barreras de protección. Aquí también revelé mis miedos y él me hizo sentir a gusto desde las primeras lecturas. Él era consciente de mi inhibición y me ayudó muchísimo. (Vea aquí la entrevista a Omar Sy).

¿Usted cree que "Samba" es una película comprometida?

Esta no es una película de mensajes, no es un drama, no es del todo una comedia y sin embargo es todo a la vez. Los problemas de los indocumentados, la dificultad de vivir ilegalmente en un país, son temas demasiado serios como para ser tratados a la ligera. Es una película sentimental sin ser exagerada.