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La exmujer del presidente ruso, Liudmila Pútina, se habría casado con un hombre 20 años más joven, según informó la televisión rusa, que retiró el reportaje de su programación ante el revuelo causado por la noticia.
"¿De nuevo casada?", era el título del reportaje del canal NTV que pudieron ver libremente los telespectadores en el Lejano Oriente ruso con capital en Vladivostok, en la costa Pacífica, pero no los del resto del país, aunque posteriormente fue colgado en Youtube.
El reportaje apunta que el rumor sobre el posible matrimonio de la antigua primera dama saltó a la luz cuando ésta cambió de apellido, renunciando al del jefe del Kremlin en favor del de Ocheretni.
Esto llevó a pensar que Liudmila, de 58 años, había contraído matrimonio con Artur Ocheretni, de 38 años, director del Centro de Desarrollo de Comunicaciones Interpersonales y que se dedica a organizar actos para el partido del Kremlin, Rusia Unida, y el consorcio Gazprom.
En caso de confirmarse, esto liberaría al presidente ruso, Vladímir Putin, quien tras separarse de Liudmila en 2013 aseguró, en respuesta a una pregunta sobre sus planes de futuro: "Primero tengo que casar a mi exesposa, luego ya pensaré en mí".
La prensa amarilla ha informado en numerosas ocasiones sobre una posible relación sentimental entre Putin y la doble campeona olímpica de gimnasia rítmica y diputada Alina Kabáeva, de 32 años, pero el Kremlin lo ha negado hasta la saciedad.
El semanario "Sobesednik" fue el primero en informar sobre el hecho de que un apartamento en San Petersburgo propiedad de la familia Putin había pasado en el catastro a nombre de una tal Liudmila Alexándrovna Ocherétnaya.
Según la fuente, los datos personales de esa mujer, lugar y fecha de nacimiento, además del nombre y patronímico, coinciden con los de la exmujer del líder ruso.
Al parecer, un nuevo pasaporte con ese mismo nombre y apellido fue dispensado el pasado 2 de febrero por los servicios migratorios de Moscú, lo que confirmaría el acto matrimonial entre la exmujer de Putin y Artur Ocheretni.
En relación con estos reportajes, el portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov, se negó a "discutir la vida privada del presidente" y sólo recordó que "Vladímir Vladímirovich y Liudmila Alexándrovna están divorciados".
Putin contrajo matrimonio con Liudmila (Shkrebneva) el 28 de julio de 1983, tras lo que residieron durante varios años en Alemania Oriental, donde el actual líder ruso trabajó para el KGB.
Su primera hija, María, nació en abril de 1985 en la antigua Leningrado, actual San Petersburgo, mientras que la segunda de sus hijas lo hizo en agosto de 1986 en Dresde, Alemania Oriental.
Ambos anunciaron su separación de manera repentina a la salida del Gran Palacio del Kremlin en junio de 2013, donde habían asistido a un ballet, aunque el hecho de que hacía años que ya no vivían juntos era un secreto a voces.
Liudmila, que conoció a Putin cuando trabajaba como azafata para una aerolínea soviética, reconoció en una biografía que no supo que su marido trabajaba para el KGB hasta un año y medio después de haberse casado.
Pedro I El Grande, quizás el gobernante más influyente de la historia de este país, fue el único mandatario ruso que se divorció mientras estaba en el poder, hace más de trescientos años, tras lo que se esposa fue recluida en un convento.