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Manizales, ciudad tradicionalmente conservadora, abre sus puertas desde hace 10 años a uno de los eventos de rock gratuitos más importantes del país. Manizales Grita Rock se ha posicionado como un referente obligado de la música en el país y ha crecido considerablemente desde su primera versión en 2006, a la que asistieron 3.500 personas, hasta la décima versión de este año.
El festival ha sido una conversación entre distintos actores: los grupos que ensayan en las casas de la cultura de la ciudad, llenos de jóvenes que unen sus búsquedas y creaciones, quienes se suben al mismo escenario al que han llegado bandas icónicas de la escena internacional como Testament, Grave, Municipal Waste, Death Angel o Carcass.
Al mismo tiempo, grupos nacionales reconocidos y con una altísima calidad se juegan un lugar en las audiciones eliminatorias, dejando para el público lo mejor de los sonidos de diversos géneros en el país. Entran en el cartel al lado de bandas como Orgy (EE.UU.), que llegó por primera vez a Suramérica y sacudió ayer a todos los asistentes con los sonidos industriales que han influenciado la música desde hace casi 20 años. O Gondwana, que desde Chile puso a brincar a Manizales con su propuesta de reggae and roll al cierre del primer día del evento.
Ayer también se alternaron los sonidos del hip hop de Sub-Zero aka Neutro y Sonido Urbano, dos grupos que representan las líricas de las calles de Manizales, con Skapidemia y el blues de Brick, otro grupo local que deslumbró al público con su calidad técnica.
Después, Desnudos en Coma y The Hall Effect dejaron claro por qué el rock alternativo colombiano es reconocido a nivel internacional como uno de los más originales, creativos y potentes. Y justo antes de los grupos internacionales, Nepentes, desde Medellín, y Profetas, que este año participó en Glastonbury, el evento más importante del Reino Unido.
Pero más allá de lo musical, el festival trasciende el impacto en la ciudad y desde ella: pone a Manizales en el circuito del rock internacional, estimula diversos sectores de la economía (por ejemplo, la ocupación hotelera en la ciudad está por encima del 90%), reconoce los procesos culturales que se gestan en escenarios alternativos del municipio y selecciona lo mejor del rock nacional para quienes llegan hasta Expoferias.
Más allá de la imagen de outsiders, conferida desde el estereotipo que cubre a los roqueros, el evento logra agruparlos alrededor de una identidad diversa, una potencialidad de encuentro y un disfrute de la música en las mejores condiciones de convivencia.
Llegar a esta décima versión ha significado “encontrar un tesoro”, tal y como lo describe la imagen del festival de este año, donde se ven un par de piratas que finalmente han llegado a su destino: “La imagen incluye la referencia al número diez romano, como símil de la figura del lugar del tesoro. Esa X es el fruto del trabajo de muchos años, que hoy ofrece al país uno de los mejores carteles para un evento gratuito de rock”, explicó Rafael Echeverri, productor general del evento.
El día de hoy estará lleno de la fuerza y potencia del punk y el hardcore. Abrirá el segundo día Colchón Viejo, grupo de punk de la Casa de la Cultura de La Enea. Luego llegará Desastre Capital, de Medellín, con casi 20 años de recorrido. Dúplex, con el hardcore, y Disidentes, con el punk de la vieja escuela, seguirán dándole vibración a la tarde. Bestiario, una particular mezcla de folk punk, estará en los sentidos de este segundo día, junto a Tiempos de Sangre, de Bogotá, que fortalece este intenso contraste con el hardcore.
Nación Criminal y Bastardos sin Nombre cierran la presencia nacional de este día con una propuesta nueva y fresca del punk de Medellín y la de un grupo que ha permanecido vigente en la escena nacional e internacional del punk desde hace varios años.
Extreme Noise Terror llega por primera vez a Colombia desde Inglaterra, considerada una de las primeras y más influyentes bandas del grind. Y para cerrar, Madball, desde Nueva York, una banda con 25 años de vigencia, ícono del hardcore en el mundo, llega a Manizales para su única presentación en Suramérica durante este año.