La biodiversidad en el posconflicto

Brigitte Baptiste decidió estudiar biología para comprender cómo se relaciona el ser humano con su hábitat. / Óscar Pérez - El Espectador

Qué rol tiene la biodiversidad en el posconflicto?

El conflicto tiene su origen en problemas agrarios, y si estamos corrigiendo esos problemas acumulados de tantas décadas, es la oportunidad de hacer una transformación de muchos de esos sistemas para convertirlos en sostenibles. Hay que construir mosaicos de conservación junto con los sistemas agroindustriales, para prevenir la aparición de futuros conflictos por deterioro ambiental. Necesitamos meter la biodiversidad ya, es el momento.

¿De qué manera se involucrará a los desmovilizados?

Hay que construir capacidades y entrenar o reentrenar a estos desmovilizados en proyectos de restauración para que puedan actuar, bien sea como guardabosques, guías de parques nacionales o como responsables de proyectos de restauración ecológica. Hay que diseñar el mecanismo. Con los compromisos de apoyo externo al posconflicto, ya hay un capital semilla para esto.

¿Cuáles son los problemas ambientales más críticos en el país?

La ilegalidad. Hemos pasado de los cultivos de uso ilícito a la ilegalidad en la explotación de oro, que es más rentable que la coca y es lícito. Lo que es ilegal son las formas de hacer minería, lo que representa una dificultad a la hora de hacer un control legal.

La protección del río Bita es uno de los grandes logros del instituto Humboldt, ¿qué otros casos exitosos esperan?

La noción de río protegido viene de una alianza con la comunidad que quiere comprometerse a protegerlo. Esa idea nos está llevando a ampliar los escenarios de conservación para Colombia. Tenemos que estar comprometidos con cuidar nuestra biodiversidad, porque es el fundamento de la seguridad ecológica nacional.

¿Cuál fue su motivación para estudiar biología?

Los temas ambientales. Estudiaba arquitectura porque estaba bastante refundida en temas de diseño, de creatividad, para los que carezco de talento (risas) y me llamaban la atención el urbanismo y la planeación del hábitat, lo que tiene mucho que ver con la ecología.

¿Cómo ve el desarrollo de la carrera en el país?

He visto orientaciones a la biotecnología, la innovación industrial, empresarial, y creo que en el país de la megadiversidad ese es un sector que hay que fortalecer indudablemente. Seguimos estando débiles en temas de ecología.

¿De qué manera llegó al Humboldt?

A través de la participación de la Universidad Javeriana en su creación. Participé en ese proceso y la universidad me prestó al Instituto para desarrollar ese componente. Acabé quedándome.

¿Qué tema de la biología le apasiona?

La parte cultural, cómo y porqué los seres humanos piensan de la naturaleza de cierta manera y no de otra.

¿Y de ecosistemas?

Estoy encarretadisima con los Llanos Orientales. El sitio más maravilloso que tiene la región norte de Latinoamérica es todo el escudo de Guyana.
La mayor experiencia que le ha dejado la docencia.

Una satisfacción increíble de ver a los estudiantes en su vida profesional, el compromiso ético, la voluntad y el optimismo de contribuir con el país. 

¿Cómo definiría la influencia que tuvo en usted Brigitte Bardot?

Representó la liberación erótica y mediática del cuerpo femenino y la experiencia vital de la feminidad abierta.

¿Qué implica vestirse al estilo kitsch?

Es una estética eclíptica, realmente no tengo estilo, me pongo lo que me gusta. Quiero transmitir la noción de libertad, la forma en que te vistas no tiene que definir tu espacio en la sociedad.

Sus hijas lo reconocen como padre ¿qué es lo mejor de serlo?

Madrugar a despertar a mis hijas para que estén felices todo el día y acostarlas viéndoles la sonrisa.

Un valor que siempre la acompañe.

La coherencia.

¿Cómo se ve en 10 años?

Más bonita.