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El sonido del Pacífico en palabras urbanas

Esta noche, en Gaira Café de Bogotá, la agrupación conmemorará junto al cantante Carlos Vives y la Usaid el Día de la Afrocolombianidad y el Mes de la Herencia Africana.

Estefanía Avella Bermúdez
21 de mayo de 2014 - 03:11 a. m.
 William Angulo comenzó la agrupación hace 14 años con el ánimo de cantarle a la forma de ver la vida. / Cortesía
William Angulo comenzó la agrupación hace 14 años con el ánimo de cantarle a la forma de ver la vida. / Cortesía
Foto: Photographer: Williams Martinez

 ¿Qué representa para usted participar en la celebración del Día de la Afrocolombianidad?

Para mí éste es todos los días, y lo conmemoro con todo lo que hago. Todo en mi vida tiene que ver con la herencia africana y soy consciente de la necesidad de reivindicar esa herencia. No pierdo la oportunidad de decirle al país que lo afro forma parte de lo que somos como colombianos.

¿De qué manera Herencia de Timbiquí transmite los valores afrocolombianos?

Es música afrocolombiana, interpretada por afrocolombianos, que cuenta historias de la gente del Pacífico y que resalta tradiciones de la gente afro. Damos a conocer al mundo que podemos hacer las cosas con excelencia.

¿Cómo la música contribuye a generar un sentido de pertenencia por nuestras raíces africanas?

Solamente hay que ver la reacción de la gente cuando escuchan a Herencia. La marimba tiene el poder espiritual de conectarnos con nuestros ancestros, y cuando la gente la escucha, acompañada del cununo y el bombo, es como si despertara el abuelo negro que todos en Colombia tenemos.

¿Cuál es el secreto para que la agrupación haya llegado a reconocidos escenarios internacionales?

No tenemos un secreto, al contrario, lo que gusta de Herencia es la autenticidad, la transparencia. Tocamos y cantamos lo que somos y sentimos. Por supuesto la perseverancia y la disciplina, sumadas a la manera original de fusionar lo ancestral con lo alternativo y lo tropical, nos hace una receta que, al parecer, a todos les gusta.

¿Cómo surgió la idea de fusionar la música del Pacífico colombiano con ritmos urbanos contemporáneos?

Simplemente expresamos lo que somos. Nuestra música es idéntica a nuestra manera de pensar y ver la vida. Cuando el corazón expresa lo que quiere es cuando se construye el propio sonido.

¿A qué se debe la transformación del tipo de música que tocaban en los primeros años del grupo?

El grupo ha tenido su propia evolución. Herencia no hace música estática, pero siempre vamos a conservar nuestras raíces. Nuestra música se mueve entre la identidad y la innovación, entre la fusión y la tradición.

¿Qué representa para ustedes haber sido ganadores de la Gaviota de Plata en Viña del Mar?

Nuestra historia es parte de un antes y un después de la Gaviota de Plata. Es un reconocimiento a nosotros y a toda la música del Pacífico, pero sobre todo es una gran responsabilidad.

¿En algún momento pensó en recorrer el mundo llevando la música del Pacífico colombiano?

Sin duda este es un sueño que estamos cumpliendo. Yo sí soñaba con cantar en muchos escenarios. Pero no me imaginaba gente en Rusia, Zambia, Argentina o Dubái coreando nuestra música y nuestra misma gente en Colombia enamorada de Herencia. Sobrepasa lo que soñé.

¿Qué es lo que más le gusta y recuerda de Timbiquí?

Su sonido. Es una tierra con un sonido propio que influye en sus habitantes desde antes de nacer. Siempre se escuchan los pájaros cantando, las olas del mar, los cantos de las abuelas, las ollas donde se cocinan y la chonta que suena en el monte antes de que la corten para volverla marimba. Eso, sumado a la tradición oral y a las fiestas patronales que reflejan una conexión ancestral cuyo vehículo al presente es la música.

¿Qué es lo más importante a la hora de componer las canciones?

Se compone a la tierra, a la manera de vivir, a las vivencias bonitas y a las no tan bonitas. Es la mezcla de sonido del Pacífico representado en palabras urbanas. En cada composición buscamos el engranaje perfecto para envolver a la urbe y a los pueblos del Pacífico.

¿Cuál es la marca propia de Herencia de Timbiquí?

Lo hacemos con pasión. Procuramos que se pueda preservar, que siga fundamentada en sus raíces, además de querer evolucionarla y dársela a conocer a muchas personas. Estamos convencidos de que con esta música podemos romper paradigmas, podemos eliminar la discriminación.

¿Cómo recuerda su niñez en San José de Timbiquí?

Mis papás trabajaban la minería y desde pequeño empecé a meterme a sótanos, me apasionaba el hecho de estar en ellos. Me gustaba pescar con nylon, andar en potrillo por el río. Tuve una niñez muy especial, de la que hoy me siento orgulloso, porque me dio la oportunidad de ser autosuficiente a los 15 años.


me.avella@gmail.com

@EstefaniaAvella

Por Estefanía Avella Bermúdez

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