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Estratega contra el matoneo

El cantautor colombiano Alfonso Espriella se unió al colegio José Max León, de Cota, Cundinamarca, para desarrollar un un plan piloto de prevención del 'bullying'. La iniciativa es extra-escolar y consta de talleres que mezclan la música y la danza. Ejemplo a seguir.

El Espectador
25 de noviembre de 2012 - 09:00 p. m.
 Para el artista bogotano Alfonso Espriella  lo más difícil de los talleres contra el bullying será ganarse la confianza de los estudiantes  / Gustavo Torrijos - El Espectador
Para el artista bogotano Alfonso Espriella lo más difícil de los talleres contra el bullying será ganarse la confianza de los estudiantes / Gustavo Torrijos - El Espectador

¿Qué es lo que caracteriza el matoneo escolar?

En la dinámica del bullying hay un factor clave y es la búsqueda del poder, generalmente de un sentimiento de desempoderamiento surge el deseo de querer dominar al otro, muchas veces se usan personas que son consideradas más débiles para sentirse poderoso, agrediéndola, pisoteándola o humillándola.

¿Cuál fue el proceso para iniciar el ciclo de talleres ‘El bienestar empieza por dentro’?

Me acerqué al colegio José Max León con la propuesta de hacer un concierto y sobre la marcha de las conversaciones salió la idea de hacer un ciclo de talleres que abordaran la temática del famoso matoneo.

¿Qué lo motivo a meterse a este proyecto?

Me gusta mucho trabajar con adolescentes; en el campo terapéutico es una población con la que siempre me he entendido bien y creo que ellos me sienten más cercano por mi edad.

¿Cómo puede ayudar la música en estos talleres?

La música es emociones, es el reflejo del mundo interior de la persona que la hace, es un medio que toca directamente las defensas mentales y emocionales que tenemos.

¿Qué cree que será lo más difícil de estos talleres?

El principal reto es ganarse la confianza del grupo, tenemos tres horas para hacerlo, es un espacio de tiempo limitado pero esa es la habilidad que se debe tener como terapeuta.

¿Aumentó la agresión entre los estudiantes en los colegios o ahora se hace más visible?

Siempre ha estado ahí, yo me acuerdo en mis días de colegio en los que yo fui agresor o agredido.

¿Se plantea esta temática en alguno de sus trabajos discográficos?

Mi labor de músico aborda siempre las temáticas del conocimiento interior, uso las composiciones para canalizar lo que tengo por dentro, tal vez eso hace que en vez de agredir a alguien por ejemplo, haga una canción, lo que de alguna manera la convierte en una autoterapia.

¿Puede criticar algo de su música?

Las criticas de mi música las hago en retrospectiva; por ejemplo, cuando yo grabé mi primer disco, ‘Trazo de ser’, hice lo mejor que pude en ese momento pero ahora lo escucho y me parece que desde lo musical es muy desordenado.

¿Se considera una persona pacifica?

Sí y no, a veces estoy tranquilo y feliz y soy totalmente pacífico pero tengo momentos en los que se me sale el lado oscuro y me enervo.

¿Qué le genera caos?

La hostilidad del tráfico en Bogotá, muchas veces cuando estamos manejando parecemos estar en una guerra.

¿Cuál ha sido su momento más feliz como artista?

Son varios pero un común de todos ellos es cuando culmino un buen concierto.

Más información de Alfonso Espriella en www.alfonsoespriella,com/Twitter: @espriell

Por El Espectador

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