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'Hay que sentir al entrevistado'

Yolanda Ruiz habla de sus anécdotas en el periodismo y resalta el importante papel de los medios, ‘testigos que también generan noticia’.

El Espectador
02 de septiembre de 2012 - 09:00 p. m.
Para Yolanda Ruiz lo peor de su época en la televisión era tener que maquillarse todos los días. / Óscar Pérez
Para Yolanda Ruiz lo peor de su época en la televisión era tener que maquillarse todos los días. / Óscar Pérez

¿Cuál es el elemento que caracteriza la radio de hoy?
El de hoy y el de siempre es la emoción. En radio hay tono, matices y ritmos que constituyen la esencia del medio.

Una embarrada periodística.
Muchas, y de cada una se aprende.

Una anécdota en el medio.
Una decisión difícil de tomar en una de las liberaciones de secuestrados cuando hubo versiones de bombardeos en la zona del operativo. En esos momentos se debe medir en segundos el impacto de una decisión editorial. Apliqué la fórmula de siempre: ante la duda me abstengo.

¿Qué hace cuando no está pensando en noticias?
Leo y disfruto de mi familia.

¿Cómo vería la llegada de una nueva cadena radial?
La competencia siempre es buena. Eso nos reta a todos, nos obliga a pensar, a mejorar. Ganan los oyentes, gana el gremio.

Un recuerdo de su comienzo en la radio.
Una entrevista que le hice a Pablo Escobar y que no se publicó. Por lo demás, con el tiempo me ha hecho pensar mucho sobre el famoso dilema de entrevistar a delincuentes.

Usted dirige ‘Voces RCN’, ¿qué es exactamente?
Una apuesta por el periodismo de análisis y de opinión con una buena dosis de gozadera sin estrés.

¿Cómo es trabajar con María Elvira Samper?
Es uno de los grandes orgullos y honores que he tenido en mi carrera. Y un reto porque su intensidad es tan grande, que le digo que es como una estampida de elefantes. ¡Pero maravillosa!

La clave de una buena entrevista en radio.
Escuchar siempre, y hay que sentir al personaje. Descifrarlo en los primeros segundos y saber con quién se habla.

La noticia que le falta dar.
Que se firmó la paz definitiva.

¿Cuántos radios tiene en su casa?
Seis.

¿Qué recuerda de su época de presentadora en TV?
Que odiaba maquillarme todos los días.

¿Radio o televisión?
Radio.

¿Cómo ve el anuncio de acercamientos con las Farc?
No hay alternativa distinta a acabar este conflicto sentados en una mesa de diálogo. Ojalá esta vez cumplan las Farc, porque el país no aguanta más guerra. Hay que apostarle a la paz.

¿Y el papel de los medios en ese proceso?
Es crucial, también debemos aprender de los errores. Debemos ser independientes y tener espíritu crítico, pero tener en cuenta que no sólo cubrimos y somos testigos, también terminamos generando hechos políticos con lo que publicamos y con el enfoque que le damos. Somos generadores de agenda pública. La responsabilidad es grande. El rigor debe ser total.

¿Sigue haciendo reportería?
Menos de lo que quisiera.

¿Qué le hace falta de Pasto?
La comida.

¿Qué libro está leyendo?
Libro de los réquiems, de Mauricio Wiesenthal.

¿ A qué periodistas escucha?
A todos los que están al aire. Es parte del oficio. Lo que más gozo, los dardos de María Elvira Samper y las cartas de Nicolás Samper en La Jugada.

¿Qué música disfruta?
Me encantan las baladas. Pura música para planchar.

¿A qué le teme?
A fallar. No al fracaso, porque de eso se aprende. Temo no estar a la altura de mis compromisos. Fallarle a la vida que me ha dado tantas oportunidades. Y temo a la muerte de los que amo.

¿En qué cree?
En la vida y en que hay algo más.

Por El Espectador

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