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¿Cómo entiende usted la moda y de qué se nutre para sus colecciones?
La moda es un medio de comunicación. Comunicamos nuestra manera de ser y cómo queremos que nos perciban a través de ella. La moda comunica el sentimiento de la sociedad en las propuestas de los diseñadores y las marcas. A mí como diseñadora me nutren el arte, la literatura, la arquitectura, el cine, la historia... me nutren mis clientes y sus necesidades.
¿Qué legado le dejó estudiar en los talleres de moda de Christian Dior y Christian Lacroix?
Fue magia para los sentidos. El mayor legado que me dejó esta experiencia fue la rigurosidad en el desarrollo de una prenda y diseñar para que las mujeres se vean bellas.
¿Cómo es su proceso de creación, por dónde empieza y cómo finaliza?
Los procesos varían según la línea de producto. En mi línea Couture normalmente cuento historias más nostálgicas y centradas en la necesidad de cada clienta, en cómo se quiere proyectar con el atuendo que va a usar en determinada ocasión. Para el prêt-à-porter se toman en cuenta otros factores, como las necesidades de un determinado grupo de mujeres entre los 26 y 46 años; se tienen en cuenta el colorido y texturas que proponen las grandes ferias como Premier Vision; se definen el color, las texturas e historias para contar. Se determina el número de piezas, se diseña y se produce el muestrario. Luego de la temporada de ventas se produce y se despacha mientras ya se está programando la colección de la siguiente temporada.
Si le pidiéramos que mirara a la mujer colombiana actual en comparación con la de hace diez años, ¿cuáles han sido sus mayores conquistas en términos de moda y estilo?
Las mujeres colombianas son más asertivas hoy en día en la forma como se visten. Están más abiertas a ensayar nuevas propuestas de diseño, son más arriesgadas en vestirse de manera individual sin tener que estar a la última moda. Ellas hacen sus propias propuestas.
¿Qué hubo de singular en su historia como diseñadora entre 2011 y 2012 para ser la mejor diseñadora en los Premios Infashion ?
Lo más importante es el nuevo rumbo que tomó mi negocio en cuanto a la reorganización de sus líneas.
¿Con sus diseños quiere ser inspiración para qué tipo de mujeres?
Mis vestidos inspiran a las mujeres a sentirse femeninas. Con nuestra línea de prêt-à-porter queremos llegar a un grupo más grande de jóvenes ejecutivas a través de precios más accesibles para vestirse de diseñador todos los días. Con mi línea Couture presto una asesoría personalizada a un determinado cliente para una determinada ocasión, siempre teniendo en cuenta sus necesidades y lo que quiere comunicar a través de su vestir.
Ha sido testigo de muchos cambios en el mundo de la moda. ¿Qué cree que le falta a este universo en Colombia para potenciarse aún más?
Pienso que hace falta una integración más cercana entre los diseñadores y el sector industrial, con esto me refiero a textileros y confeccionistas.
¿Cómo la afectan los tratados de libre comercio que firmó Colombia?
Los tratados de libre comercio nos acercan a más mercados, podemos trabajar con telas especializadas y nos permite llegar a este mercado con precios competitivos.
¿Sigue siendo la moda una cosa de élite, excluyente, para unos pocos?
Para nada, los años gloriosos de la alta costura pasaron hace más de 50 años. Estamos en un momento donde la moda está al servicio de muchos.
Ha sido capaz de sacar la moda del mero universo del vestuario y volverla más transversal. ¿Qué la ha movido a esto?
La necesidad de reinventar mi forma de trabajar y suplir las necesidades de mis clientas y adaptarme a los cambios que tiene el comportamiento de las mujeres en la sociedad.
¿Qué piensa de que la cantante Goyo, de la agrupación Choquibtown, sea el nuevo ícono de la moda según las votaciones de los colombianos?
Goyo es una mujer muy auténtica al igual que su música. ¡Ella no puede ser más que inspiración!