Publicidad

“Lo que no se comunica se muere”

Con “El bus de la memoria” y “La música del rebusque”, la restauradora quindiana busca reconstruir las remembranzas de los capitalinos a través de las actividades urbanas que le miden el pulso a la ciudad.

Un chat con...
09 de febrero de 2016 - 04:44 a. m.

¿Cuáles son los retos a los que considera que se enfrentará como nueva directora del Archivo de Bogotá?

El Archivo tiene tres grandes retos: cuidar el patrimonio de la ciudad, regular toda la normatividad archivística hacia el Distrito, pensando en hacer una administración más eficiente, más transparente para los ciudadanos, y el tercer reto es cómo comunicarnos interactivamente con los ciudadanos para cuidar y seguir construyendo esa memoria histórica.

¿Qué estrategias tendrán en cuenta para comunicarse de manera interactiva con los ciudadanos?

Tenemos un programa que se llama “El Archivo fuera del archivo”, al cual pertenecen el Bus de la Memoria, las exposiciones itinerantes, la Cátedra Bogotá, la recuperación del proyecto de álbum de familia, la revista De Memoria y la recuperación de las actividades urbanas. En esta última, por ejemplo, hemos ido a la Séptima a recoger las experiencias de los músicos urbanos, que estarán recopiladas en un disco llamado La música del rebusque y que será parte de la fonoteca del Archivo de Bogotá.

¿Cuál cree que será su mayor aporte?

Sacar el Archivo del archivo, porque lo que no se comunica se muere.

¿Qué le gustaría comunicarles a los bogotanos acerca de la ciudad?

Que la ciudad es un proyecto en construcción permanente y que lo que se construye se deconstruye. Es decir, a veces nos quejamos de la ciudad, pero la construcción de Bogotá es una responsabilidad de todos, y un ciudadano conocedor de su historia es un ciudadano mucho más capaz de tomar decisiones, de ser responsable con la ciudad.

Aunque es del Quindío, sus estudios de restauración los realizó en Bogotá, en los años 80. ¿Cómo recuerda la ciudad de hace 30 años?

Llegué a esta ciudad a mediados de los 80, cuando tenía lugar un evento que marcó la historia del país, la toma del Palacio de Justicia. Era una ciudad fría. Me encantaba la arquitectura del centro. Ahora es una ciudad mucho más liberal, pero también siento tensiones donde hay movimientos que quieren una mayor pertenencia, un mayor reconocimiento en los procesos de la ciudad que reclaman su territorio.

¿Y qué lugares le gustaba frecuentar?

Me encantaba cruzar la Plaza de Bolívar, caminar por el barrio La Candelaria, por el Pasaje Hernández y el Pasaje Rivas, donde todos los estudiantes que estábamos armando pequeños apartamentos comprábamos desde la cuchara hasta la mesa.

Como restauradora, ¿qué imagen o qué hecho le gustaría reparar?

La tragedia del Palacio de Justicia, pero en especial una escena que nunca olvidaré. Ese día hubo una desbandada de gente corriendo por la Séptima y yo estaba en el balcón del apartamento de mi novio, que quedaba en la calle 18 con carrera 5ª. La gente intentaba huir y por esa calle empezaron a bajar pelotones del Ejército y subía corriendo una niña de pelo largo con una mochila. Cuando ella llegó a la 5ª se encontró con la escuadra del Ejército, buscó hacia dónde podía correr y uno de ellos le pegó con el escudo. Ella se desmayó y la montaron en un camión. Esa niña casi tenía mi edad.

¿Un hecho que la haya marcado y que conserve en su archivo personal?

Estando en el Archivo General de la Nación fui a hacer una visita a un archivo de un pequeño pueblo del país que en la Colonia fue muy importante y que era cabecera provincial donde se daban cédulas reales en el siglo XVII. Fui a hacer una asesoría de rescate, porque este archivo del año 1600 con cédulas reales estaba en las carnicerías del pueblo. La noticia llegó porque un señor que vivía en ese pueblo entró a la cocina de su casa y sacó el papel en que venía envuelta la carne y se dio cuenta de que era una cédula expedida en 1680. Eso ilustra mucho la consciencia histórica que tenemos. A mí me marcó.

¿Qué herramientas son infaltables?

No puedo vivir sin un lápiz y un cuaderno. Escribo y dibujo bastante. Para entender un problema tengo que dibujar. Utilizo mucho la teoría de los conjuntos para resolver problemas.

¿Qué es lo más quindiano que tiene?

El hablado. Dicen que hablo duro, que soy mandona, pero es más el tono cultural.

¿Qué libro volvería a leer?

Siddhartha, de Hermann Hesse, porque hace la diferencia entre el dolor y el sufrimiento.

Un sueño.

Sacar el Archivo adelante, como un trasatlántico.

Una manía.

Soy perfeccionista. Me cuesta decir no.

Una frustración.

No ser pintora.

Por Un chat con...

Temas recomendados:

 

Sin comentarios aún. Suscribete e inicia la conversación
Este portal es propiedad de Comunican S.A. y utiliza cookies. Si continúas navegando, consideramos que aceptas su uso, de acuerdo con esta política.
Aceptar