La gran operación del mercado tabacalero colombiano, la compra de Protabaco por parte de Coltabaco (controlada por la multinacional estadounidense Philip Morris) tendrá que esperar.
Así lo consideró la Superintendencia de Industria y Comercio (SIC), al objetar una integración que, además de darle una posición privilegiada a la empresa que resulte de la fusión (de 78% en todo el mercado y 83% en el segmento medio-bajo, el de mayores ventas), también dificultaría la entrada de nuevos competidores al país.
“Quien esté posicionado en el mercado va a tener mayores posibilidades de consolidarse determinando, entre otras cosas, las condiciones, las marcas disponibles y los precios”, dijo Gustavo Valbuena, superintendente de Industria y Comercio, en diálogo con El Espectador.
Para tomar esta decisión, el ente regulador realizó un análisis económico sobre el impacto de la integración en los precios, para el cual tuvo en cuenta los registros de los últimos cinco años, en 15 ciudades del país. Según sus cálculos, el precio promedio en el segmento medio-bajo tendría un incremento del 4%, cuando estos crecen normalmente un 0,7% al año.
Actualmente, el mercado colombiano está integrado por Coltabaco (con una participación del 50%), Protabaco (con el 32%) y British American Tobacco (BAT, que posee el 18%). La integración de los dos principales actores tendría un valor de US$452 millones y fue anunciada en julio de 2009.
“La decisión tiene un enfoque que no corresponde a cómo vemos las dinámicas del mercado, en particular de la llegada de terceros y de la ferocidad con que compite BAT”, dijo Emilio Archila, apoderado de Coltabaco, y agregó que la empresa presentará recurso de reposición. Protabaco prefirió no pronunciarse.