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Plan de un rescate bajo tierra en Chile

Para este martes está presupuestada la llegada a la mina de la máquina perforadora con la que se pretende liberar a los 33 mineros.

Redacción Internacional
23 de agosto de 2010 - 10:00 p. m.

Si la realidad se ajusta a los planes, este martes deberá llegar a la mina San José, en pleno desierto de Atacama, la máquina perforadora Strata 950, un taladro enorme, de 33 toneladas, del que dependerá el éxito de una difícil y extensa misión: rescatar a los 33 mineros que desde el 5 de agosto, tras un derrumbe, permanecen atrapados a 688 metros bajo tierra.

Los mensajes que los mineros pudieron enviar a través de una sonda que buscaba señales de vida en el refugio de la mina devolvieron la esperanza a los familiares.

Después de enterarse de que los 33 trabajadores estaban bien, bebiendo agua que escurría de los muros y recibiendo luz de uno de los camiones estancados, las autoridades chilenas ordenaron traer desde el yacimiento de Codelco Andina, a cerca de 1.000 kilómetros de San José, el taladro que iniciaría las labores de rescate.

“La espera es muy diferente ahora. Es una espera sin angustia. Esto no se acaba, pero estamos más esperanzados de que el resultado llegue”, decía este lunes Elías Barrios, hermano de Carlos Barrios, uno de los mineros atrapados en el corazón de la montaña. Las familias han asumido con alegría y disposición el pedido de paciencia que expresó el ministro de Minas, Laurence Golborne. Pasarán al menos tres meses antes de que puedan volver a verlos.

La hoja de ruta inicial del rescate es extensa en plazos y trabajos. Desde este martes, una vez lleguen todas las piezas de la Strata 950 a la provincia de Copiapó —en donde se encuentra la mina—, un grupo de operarios comenzará a juntarlas. El armado de la máquina tardará cerca de una semana e inmediatamente después comenzarán las perforaciones.

Con un avance promedio de entre 20 y 30 metros por día, el taladro abrirá un ducto de no más de 37 centímetros de diámetro que desembocará en el refugio en 40 ó 50 días (ver infografía) . Luego, se emprenderá el proceso de ensanche del ducto, que en este caso consiste en perforar lo perforado para lograr un diámetro de entre 66 y 70 centímetros, lo suficiente para que al cabo de 60 ó 70 días más, los 33 mineros puedan ser ascendidos uno por uno hacia la superficie en canastos o camillas halados por cables de acero.

Mientras que todo esto ocurre, los mineros permanecerán conectados con el mundo externo por medio de tres sondas. Una estará dedicada a transportar sales de hidratación y geles calóricos que les servirán de alimento. La segunda, tendrá la función de establecer un puente de comunicación entre los mineros y el exterior. Y la tercera sonda se empleará para abastecer el refugio de agua y medicinas tranquilizantes y antidepresivas.

El ministro de Salud de Chile, Jaime Mañalich, aseguró que todas las provisiones de las que disponen garantizarán a los mineros atrapados una buena alimentación. Sin embargo, “el problema esencial va a ser el de las secuelas psicológicas que esto puede dejar en el mediano y largo plazo”.

La preocupación del ministro Mañalich se centra en los meses que los trabajadores tendrán que soportar encerrados en el refugio, sometidos a temperaturas superiores a los 35° centígrados, a una comodidad escasa para la convivencia en grupo. “Es muy importante no perder el orden, que no haya violencia entre ellos, que se mantenga un liderazgo, que podamos establecer un ciclo de horarios y poder transmitir noticias de los familiares”, puntualizó el mandatario al diario chileno El Mercurio.

De otro lado, Alejandro Bohn, uno de los dueños de la mina San José, cuestionado por la aparente violación de los protocolos de seguridad para la explotación minera, declaró este lunes que cree difícil poder pagar los sueldos de los 33 trabajadores, al tiempo que su abogado, Hernán Tuane, aseguró que están analizando la posibilidad de declararse en quiebra.


Rescates mineros

Abril, 2010

Shanxi, China

Durante tres semanas, 115 mineros permanecieron bajo tierra debido a de un derrumbe causado por una inundación. 283 socorristas, entre ellos seis buceadores, trabajaron en el rescate de los mineros, que en el interior de la mina se alimentaron de cortezas, aserrín, papel y carbón, de acuerdo con la BBC. En los hechos perdieron la vida 38 mineros.

Mayo, 2006

Tasmania, Australia

Dos mineros en la localidad de Beaconsfield, quedaron atrapados a un kilómetro de profundidad en una mina de oro. Protegidos por una jaula de metal, pasaron dos semanas bajo  tierra, bebiendo el agua filtrada de las piedras. Al final, una sonda establecida por los rescatistas les facilitó la alimentación. El tercero del equipo murió durante el derrumbe.

Febrero, 2006

Silesia, Polonia

Un minero quedó atrapado a más de un kilómetro de profundidad en una mina de carbón. A través de un tubo roto logra respirar y comunicarse con los rescatistas. Luego de cinco días sale a la luz.

Julio, 2002

Pensilvania, EE.UU.

Una inundación deja atrapados en el interior de una mina de carbón a nueve mineros. Los hombres pasan más de tres días a 73 metros de profundidad, hasta que son rescatados ilesos.

Por Redacción Internacional

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