Aún trastabillando por la crisis política que les dejó la pérdida de las elecciones legislativas en Argentina, Néstor Kirchner y su esposa se enfrentan esta semana a un nuevo escándalo que pone en duda la licitud de su patrimonio.
La pareja presidencial declaró ante la Oficina de Anticorrupción que su capital aumentó en un 158% durante 2008, alcanzando una cifra superior a los US$12 millones, lo cual suscitó inmediatamente todo tipo de reacciones.
El ex gobernador de la provincia de Santa Cruz Sergio Acevedo, quien fuera además jefe de la Secretaría de Inteligencia del Estado, señaló, por ejemplo, que este incremento responde a “una tasa de ganancias que solamente tienen actividades no lícitas”.
En su declaración, los Kirchner afirman que sus ganancias provienen de los negocios privados. Entre las riquezas que componen ese patrimonio, ahora figuran cuatro empresas, bienes inmuebles —12 pisos, seis casas, seis terrenos y cuatro locales—, un automóvil y depósitos bancarios.
La mayor parte de los ingresos de la pareja presidencial corresponde a los alquileres que cobran por sus inmuebles, incluidos los dos hoteles que tienen en El Calafate. Por ese rubro declararon haber percibido en 2008, cerca de US$2’600.000.
“Sorprende la magnitud y la desproporción del aumento en un país donde no le ha ido bien a nadie en el último año y en el que los indicadores marcan que aumentaron la pobreza, la desocupación, el trabajo en negro, la brecha entre ricos y pobres”, comentó al respecto Acevedo.
Por su parte, el jefe de Gabinete, Aníbal Fernández, defendió a sus jefes, arguyendo que “nadie que ejerza el poder está impedido de tener un patrimonio propio y que éste tenga vida”.
No obstante, las cifras no dejan de generar suspicacias. Desde que llegaron al poder en 2003, su fortuna se ha incrementado en un 572%. Según un informe publicado este fin de semana por el diario La Nación, los Kirchner habrían multiplicado por seis su fortuna desde que llegaron al poder, en 2003, utilizando, entre otras estrategias, “comprar terrenos fiscales muy baratos y venderlos caros”. El diario también reveló que la justicia argentina tiene abiertas dos causas por enriquecimiento ilícito a la pareja.
La última declaración jurada presentada por la presidenta Cristina Fernández motivó que los diputados Fernando Sánchez, Elsa Quiroz y Juan Carlos Morán solicitaran a la justicia que se investigue tanto a ella como a su esposo, bajo la acusación de enriquecimiento ilícito y lavado de dinero.
Además, el abogado Ricardo Monner pidió que se reabra una causa contra el ex presidente por presunto enriquecimiento ilícito, que fue cerrada el año pasado.