El ingreso de Venezuela al Mercosur (Mercado Común del Sur) ha tenido dos fuertes opositores: los parlamentos de Paraguay y Brasil, que tienen en vilo la adhesión venezolana. Desde 2006, cuando el presidente Hugo Chávez se unió al grupo, han sido múltiples sus esfuerzos para que la incorporación del país sea un asunto formal.
Sin embargo, Chávez parece no ser bienvenido. El gobierno de Paraguay, por ejemplo, decidió aplazar la ratificación del ingreso venezolano para cuando Hugo Chávez tenga mejor imagen, pues por el momento el 75% de la corporación lo rechaza. Por el lado de Brasil, miembros del Senado se han mostrado muy reacios a aceptar a Venezuela, porque consideran que “Chávez es un peligro”.
Para tomar la decisión definitiva y votar sobre el espinoso asunto, los parlamentarios llevaron al alcalde mayor de Caracas, el opositor Antonio Ledezma, para hablar de la situación del país. El hecho generó fuertes críticas del gobierno venezolano, que calificó al invitado de “amigo del imperio”.
La sorpresa fue que Ledezma habló en favor del ingreso de su país al Mercosur. El alcalde caraqueño fue muy crítico en relación con Chávez y la situación de la democracia venezolana, pero pidió a los brasileños aprobar el ingreso al Mercosur. La votación final será hoy y, según senadores, los tropiezos puestos por Chávez los despejó su más grande crítico, Antonio Ledezma.