El análisis de entrevistas a más de 3’500.000 individuos, realizadas entre 1993 y 2008 por parte de investigadores de la Universidad de Columbia y el City College de Nueva York, determinó que la obesidad se ha convertido en un peligro tan grave para la salud como el consumo del tabaco.
Los resultados fueron divulgados a través de la revista American Journal of Preventive Medicine demostró que si bien la proporción de fumadores declinó 18,5% en Estados Unidos, la pérdida de calidad en años de vida se mantuvo estable en un nivel de 0,0438. Una de las explicaciones para este fenómeno sería el incremento en el porcentaje de obesos en el país del norte. El Departamento de Salud de Estados Unidos calcula que alrededor del 60% de la población sufre de sobrepeso.
Según los científicos, en los años estudiados, el consumo de tabaco se reflejó en el número de muertes, en tanto que el impacto mayor de la obesidad se produjo en la cifra de enfermedades.
Aunque la expectativa de vida subió en las últimas décadas, el aumento de la contribución a la mortalidad que representa la obesidad podría llevar a una declinación futura en esa expectativa de vida, advirtieron los científicos.