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A los líos que por estos días enfrenta el Instituto de Desarrollo Urbano (IDU) por cuenta de los retrasos en la construcción de la Fase III de Transmilenio, los cuales tienen en vilo la permanencia en el cargo de su directora, Liliana Pardo, se sumó ayer una denuncia del contralor distrital, Miguel Ángel Moralesrussi, quien advirtió sobre más demoras en esas obras.
Según el representante del ente de control, uno de los trabajos más atrasados de la Fase III es la estación subterránea, a la altura del Museo Nacional, cuyo contrato se firmó en junio de 2008.
A pesar de que el IDU, y el mismo alcalde Samuel Moreno, insisten en que el cronograma de los trabajos marcha sobre ruedas, el contralor volvió a asegurar que hay “enormes retrasos” en el mismo.
“En el Museo Nacional no se ha tocado un ladrillo; no se ha intervenido ningún puente vehicular, falta el de la 13 y el de la 7ª, y hasta ahora se inició la demolición del puente de la 26 con Caracas, que forma parte de la obra de la estación central, la cual presenta retrasos por la falta de adquisición de 62 predios”.
El Espectador consultó con el IDU acerca del caso específico de la estación subterránea y la entidad quedó en enviar una respuesta, pero al cierre de esta edición no se había pronunciado al respecto.
Por El Espectador
